El próximo 3 de enero darán comienzo los trabajos que acabarán con los problemas de desprendimiento del Peñón Rodao (Mijas Pueblo). Hasta entonces, los operarios municipales trabajarán en la retirada de los árboles que crecen sobre esta superficie.

“Se trata de la primera intervención necesaria para acometer este proyecto”, explicaba el edil de Urbanismo Manuel Navarro, añadiendo que las “encinas, acebuches y olivos de esta zona serán trasplantados a otros puntos del municipio”.

La demolición de la roca prevista para principios de enero se desarrollará en diferentes fases. Las piezas de mayor tamaño se eliminarán mediante un proceso de cemento expansivo, mientras que las más pequeñas serán retiradas de forma manual.

El equipo de gobierno advierte de que, debido a la dificultad y peligrosidad de los trabajos, la vía deberá permanecer cortada totalmente al tráfico, al menos durante un mes, en la zona de las obras.

El plazo de ejecución de la obra es de, aproximadamente, tres meses y medio. El proyecto fue adjudicado por la vía de urgencia a la empresa Conslar por algo más de 200.000 euros. La intervención supondrá, además, la ampliación y el asfaltado de la calzada.

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