Los funkos fueron creados por Mike Becket en el garaje de su casa en Washington en el año 1998, su popularidad se extendió gracias a Big Boy, la mascota de un reconocido restaurante. Su nombre se debe al juego de palabras que usó su creador: Fun (divertido) y Co (compañía). 

Desde entonces, han pasado más de dos décadas, y personajes públicos, deportistas, cantantes, actores, sagas de videojuegos, películas, cómics, series o dibujos animados, han contado con su versión de este coleccionable. Estas figuras cuentan con una legión de fieles seguidores, hoy  reconocidos en el mundo con el término de ‘funátic’ o funáticos. 

Son muñecos deseados por los niños, que buscan los funkos de las sagas del momento como Pokemon, Naruto, Los Vengadores, pero también por los adultos, ya que tienen una fuerte carga nostálgica, y es ahí donde reside su principal éxito junto con su estilo ‘chibi’. “Mi cliente principal se mueve en una franja de edad entre los 20 y los 50 años, porque más que ser un juguete es un coleccionable, contamos con funkos de Tiburón, Regreso al Futuro, Gremlins, entre otros, pero también de sagas más actuales y con un gran número de seguidores como Harry Potter o Stranger Things”, aseguró el propietario de Súper Arcade, Ismael González. 

 

Su tienda de Las Lagunas está especializada en estos artículos, contando con unos 2.000 modelos distintos y alrededor de 9.000 figuras en existencias. Números tan sorprendentes como los de Angelique Portillo, clienta de Súper Arcade, que exhibe en su casa una colección de casi 1.000 funkos diferentes. “Me faltan cinco para llegar a los mil, mi marido y yo coleccionamos, de Marvel, Dragon Ball, Disney y los que nos van gustando”, asegura Portillo, quien cuenta con un buen número de seguidores en Instagram (@funkocaris). 

Tres curiosidades: la primera, la gran mayoría de coleccionistas de funkos los conserva sin abrir, en sus cajas originales, de hecho adquieren cajas transparentes para su mejor conservación; la segunda, los funkos se lanzan en serie de seis reproducciones del mismo modelo, siendo uno de estos la versión ‘Chase’ o especial, ya que añade algún elemento que da valor a esa réplica, que además es muy cotizada por los coleccionistas; y tres, si quieren saber más sobre este fenómeno, pueden ver el documental ‘La fábrica de diversión: La historia de Funko’.