El equipo de gobierno ha decretado el cierre de un bar, situado en el Diseminado El Chaparral, por incumplir numerosos preceptos sanitarios y carecer de la licencia municipal de apertura, obligatoria para la explotación de este tipo de negocios.

El establecimiento fue sometido a inspección rutinaria por parte de los técnicos de la Concejalía de Sanidad, cuyo informe deparó numerosas anomalías, como la carencia del local del certificado de desinfección, desinsectación y desratización, presencia de maderas no permitidas en la cocina, cuya puerta exterior permanecía abierta y sin ningún tipo de protección que impidiera la entrada  de insectos o de otro tipo de animales.

Además, el local no dispone de lavavajillas ni de lavamanos de accionamiento no manual. El sistema de extracción de humos no se encuentra en las adecuadas condiciones higiénicas y los inspectores municipales detectaron presencia de alimentos sin envasar en las máquinas frigoríficas.

El techo de la cocina  no es de material permitido ni adecuado y, entre otras irregularidades, las personas que atendían el bar no están en posesión de del carné de manipulador de alimentos.

Igualmente, los servicios municipales de Industria detectaron que el local no disponía de la preceptiva licencia  municipal de apertura, aunque el negocio estaba dado de alta en los padrones fiscales de la Agencia Tributaria.

El decreto de cierre tiene carácter cautelar “hasta tanto no se subsanen todas las anomalías y deficiencias, dada la gravedad de las mismas”, según señala el texto legal que obliga a su propietario a la clausura del negocio hostelero, al tratarse de una “actividad ilegal”.

El equipo de gobierno ha puesto en marcha una campaña de inspección a establecimientos hosteleros del municipio, a fin de que éstos cumplan con todas sus obligaciones sanitarias y urbanísticas. Campaña que en los últimos meses ha provocado diversas órdenes de cierre contra locales hosteleros.

Comparte esta noticia desde el siguiente enlace: https://mijascom.com/?a=3732