La AMPA La Cala del IES Torre Almenara se sumó este martes a las concentraciones convocadas en todo el país contra el acoso escolar, tras el caso de la joven sevillana Sandra Peña, que sufría ‘bullying’ en su colegio y que hace unos días se quitó la vida. Ante esta lacra, la presidenta del colectivo caleño, Yolanda Gutiérrez, mostró su apoyo a todas las víctimas e insistió en la necesidad de que los centros educativos tomen medidas inmediatas cuando detecten algún caso de maltrato en las aulas. “Yo puedo hablar de nuestro instituto y nos consta que están muy pendientes de este asunto y que actúan muy rápido, pero entendemos que debe ser difícil porque el número de alumnos es muy elevado, de unos 730, y entre profesorado y dirección puede haber unos 65 docentes”, señaló. 

Gutiérrez también destacó hoy la importancia del entorno familiar en la prevención del acoso escolar, “porque la educación viene de casa, aunque es verdad que, por mucho que tú eduques, hay muchos factores que influyen, como los móviles, las redes sociales y la propia sociedad… por eso tenemos que intentar visibilizar este problema y, lo más importante, apoyar y estar con aquellos niños y jóvenes que, todavía por desgracia, sufren acoso escolar”.

 

Postura de la Federación Comarcal de Ampas 
La Federación Comarcal de Ampas de la Costa del Sol también quiso transmitir su “total apoyo a la familia de Sandra Peña en estos difíciles momentos, compartiendo su dolor” y volviendo a reivindicar en la manifestación del martes 28, que convocó el Sindicato de Estudiantes en Málaga, “la imperiosa necesidad de adoptar las medidas oportunas” para prevenir situaciones como la ocurrida y que, según la federación, “no es una excepción sino la más grave de las consecuencias del acoso escolar” en los centros educativos, “instalado en un discurso de odio y un grave ambiente de intolerancia que vemos como tristemente no deja de crecer y que debemos erradicar con el firme compromiso de toda la sociedad”, apuntó ell presidente de la federación, Miguel Gallardo. 

“El acoso escolar debe abordarse con celeridad y sin titubeos: aumentando las medidas de prevención y agilizando unos protocolos que en muchas ocasiones se muestran tibios o inoperantes”, consideró Gallardo, que abogó por promover la cultura de la tolerancia, el respeto y la convivencia. “La Escuela Pública debe ser un espacio seguro y proactivo en erradicar conductas disruptivas y claramente peligrosas”, añadió para proponer que los servicios de salud mental interactúen de manera más eficaz con los equipos directivos y orientadores “para conseguir una labor más temprana en su abordaje”. 
Gallardo también consideró necesaria la participación de las familias y agilizar “la labor de orientadores y enfermeros escolares para que puedan detectar los problemas en sus inicios y así evitar tragedias”.
 

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