The Gangberries señaló la noche del viernes 14 en el calendario de la música con las notas de su blues sureño. En un ambiente íntimo y cargado de emoción, el cuarteto, liderado por el guitarrista y vocalista Fran Pacheco, ofreció en el Manuel España un recorrido por temas clásicos de Johnny Winter, Muddy Waters, B.B. King y Eric Clapton, fusionando el blues tradicional con un toque rocanrolero. Y es que The Gangberries es una banda malagueña que rinde homenaje a los grandes íconos del género desde 2012, aunque sus músicos tienen más de 20 años de bagaje musical a sus espaldas, con presencia en bandas tan míticas como Lito Blues Band, Richard Ray Farrell Band, Mama Kin o Tabletom. 

"Somos cuatro músicos con una misma obsesión: mantener viva la esencia del blues", explicó Pacheco antes del concierto. Acompañado por un pianista granadino, un baterista argentino y un bajista malagueño, el grupo destacó por su energía y conexión con el público, que abarrotó el teatro. 

El repertorio, diseñado para "homenajear a los maestros", incluyó versiones revitalizadas de clásicos como ‘Sweet Home Chicago’ y ‘Texas Flood’, arrancando ovaciones del público. "Es increíble cómo transmiten esa pasión cruda del blues", comentó Esther García, una de las asistentes, quien acudió con su pareja, José Antonio Cabello, para "romper la rutina con buena música". 

 

El concierto atrajo a un público variado, desde jóvenes curiosos hasta veteranos amantes del género. José Manuel Escalante, asistente junto a su hija Elena de 12 años, destacó la importancia de "compartir cultura en familia” ya que “quiero que ella descubra que el blues es la raíz de mucho de lo que escucha hoy", afirmó. 

Por su parte, Margarita Woods, acompañada de su marido y amigos, resaltó el poder emocional del género: "El blues te toca el alma; no hay otro estilo igual". 

Primeras veces

Este concierto marcó el debut de la banda en el Teatro Manuel España, un espacio que, según Pacheco, "tiene un encanto especial". El evento también sirvió para reivindicar la oferta cultural local. "A veces subestimamos lo que tenemos aquí mismo", reflexionó Margarita Woods, quien prometió volver para futuros espectáculos. 

 

Con un pie en la tradición y otro en la modernidad, The Gangberries demostró que el blues sigue muy vivo, no solo en los escenarios, sino en el corazón de un público que baila, grita y siente cada nota como propia.

Comparte esta noticia desde el siguiente enlace: https://mijascom.com/?a=33514