Los autores de las obras de la exposición colectiva de cerámica que se inauguró el viernes 12 en la Casa de la Cultura de Las Lagunas coinciden todos en que el barro tiene algo especial. Cuando crean sus piezas con las manos sienten que se relajan e incluso que desconectan del mundo por un rato. En total, son más de un centenar de alumnos los que tiene la profesora Ana Rico, tanto de Las Lagunas como de La Cala. “Tengo alumnos desde los 5 añitos hasta personas que tienen más de 70 años”, explica Rico, orgullosa de todos ellos y de los trabajos expuestos. “Estoy encantada con mis alumnos, porque más que mis alumnos son mis amigos y los pequeños son mis niños”, añadió la profesora.
La temática principal de la exposición son las aves, aunque encontramos todo tipo de piezas. También la temática utilizada ha sido muy variada. Y es que, según Rico, el mundo de la cerámica es muy amplio “y siempre hay algo nuevo que aprender”. En cuanto a los alumnos, todos aseguran que les encanta ir a las clases cada semana.
Indraja Puzaite y Daría Kodzis son amigas y van juntas a cerámica desde pequeñas. Estas chicas están a punto de cumplir 18 años y aseguran que las clases de la UP les aportan mucho. “Nosotras siempre nos hemos inclinado por el mundo de las artes, más que por las ciencias. Y aunque siempre nos han presionado para que nos metamos en cosas más académicas, para nosotras ir a cerámica cada semana es como seguir conectada a nuestra parte más artística y chula”, comentó Kodzis.
En el mismo sentido se expresó Puzaite: “ir a clases de cerámica es como una tradición para nosotras, somos amigas desde el colegio y vamos juntas a las clases de cerámica. Nos gusta porque puedes hacer cosas que te gustan, hacer regalos, llevarte las piezas a casa, está guay”.
- La profesora Ana Rico con algunos de sus alumnos de cerámica.
- M.F.
El barro, un arte que engancha
A Montse Pastora, otra alumna, le gusta la cerámica y las manualidades en general desde pequeña: “A mí siempre me gustó la cerámica y siempre quise apuntarme a dar clases. Y ahora que tengo tiempo y surgió la oportunidad de apuntarme en la Casa de la Cultura estoy disfrutando mucho y estoy muy contenta de poder continuar con esta pasión que siempre he tenido desde pequeña”.
Lo mismo le pasa a Adoración Ponferrada, también alumna de uno de los grupos de adultos de las mañanas. “Hacía años que quería apuntarme a cerámica y ahora que tengo tiempo libre disfruto con las clases. Haciendo cerámica te relajas, te concentras… a mí me encanta y es raro la persona que empieza y no se engancha, porque el barro, cuando lo tocas con las manos, lo pintas, esperas que se seque… no sé, el barro tiene algo especial que engancha”, explica.
- El pequeño Martín de 7 años asegura que haciendo barro se relaja y se lo pasa bien.
- M.F.
Pequeños grandes artistas
Los más pequeños también se mostraron orgullosos de ver sus obras expuestas en la sala de exposiciones. La pequeña África guía a su padre por toda la sala mientras le explica orgullosa cómo ha hecho su figura. Igual que Martín que, con siete años, ya está haciendo también sus primeros pinitos artísticos. “Yo me apunté a cerámica porque me tranquiliza, me gusta, es divertido y siempre he querido hacer esto. Me gustan mucho las manualidades”, explica Martín, quien acudió a la inauguración acompañado de su madre. Él ha hecho un simpático búho que, una vez termine de estar expuesto, se lo regalará a su madre. “Una pieza se la regalo a mi madre y otra a mi padre y así lo voy haciendo”, detalla el pequeño artista.
La muestra se puede visitar hasta el 19 de abril en la Casa de la Cultura de Las Lagunas. Seguro que les sorprenderá.
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