El Pleno del Ayuntamiento de Mijas ha aprobado por unanimidad una modificación de la Ordenanza Municipal Reguladora de Instalaciones Publicitarias, que permitirá al equipo de gobierno sacar a concurso la concesión administrativa para la instalación de vallas publicitarias en zonas de dominio público o titularidad municipal.

Mijas se dotó en 2009 de la referida ordenanza reguladora, si bien el término municipal se encuentra plagado de vallas publicitarias que en su práctica totalidad no cuentan con los permisos ni licencias municipales pertinentes. Más seiscientas vallas de estas características han sido contabilizadas por los servicios municipales, muchas de ellas en clara contraposición a los intereses paisajísticos de Mijas como municipio turístico.

Situación que motivó al equipo de gobierno, pocos días después de asumir el mandato, a iniciar los trámites burocráticos pertinentes para la retirada de este tipo de vallas publicitarias, comenzando con aquellas instaladas en terrenos de titularidad pública, e incoando expedientes a las ubicadas en solares privados y en cuya instalación no medió licencia alguna. Así, en estos cuatro meses de gobierno municipal, casi un centenar de vallas publicitarias ilegales han sido ya retiradas.

El objetivo del equipo de gobierno que dirige Ángel Nozal es convocar un concurso público para la concesión de la instalación de monopostes en suelo público, en una cuantía máxima de 80, de los que un 10 por ciento estarán a disposición del Ayuntamiento de Mijas para ofrecer información exclusivamente municipal. Sólo se permitirá la instalación de vallas publicitarias en dominio público local o en suelo de titularidad municipal,De hecho, uno de los puntos incorporados a la ordenanza afirma que “sólo se permitirá la instalación de vallas publicitarias en dominio público local o en suelo de titularidad municipal, mediante régimen de concesión, como consecuencia de concurso convocado por el Ayuntamiento”.

Los servicios municipales trabajan ya en la elaboración del pliego de condiciones para la licitación, en el que se contempla que la empresa que resulte concesionaria deberá hacer frente a un canon de 150.000 euros, además de instalar 400 papeleras en el término municipal, según explicó durante la sesión plenaria el alcalde Ángel Nozal, quien justificó la política de retirada de vallas publicitarias ilegales en “la barbarie que se ha cometido con el paisaje”.

Además, Nozal explicó que la apuesta por los monopostes tiene un claro interés paisajístico puesto que “a diferencia de las vallas tradicionales, que impiden la visión desde el suelo, los monopostes dejarán ver el paisaje”.

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