Redacción. Las ampas de La Cala continúan con el calendario de concentraciones establecido para hacer llegar a las administraciones sus reivindicaciones, la principal es la construcción de dos centros: un instituto y un colegio en el núcleo caleño, a lo que se suman otras peticiones como la eliminación de las aulas prefabricadas y una bajada de la ratio en las clases. Ayer se volvían a concentrar, en esta ocasión, a las puertas del colegio El Chaparral. Ana Delgado, presidenta del ampa Limapa, aseguró que “los colegios y los institutos de La Cala están saturados, están al límite, están metiendo prefabricadas y esa no es la solución, la ratio está al máximo, que son 28 niños. Cada vez se edifica más y vienen más niños y no sabemos dónde los piensan meter”.

En la manifestación participó una representación de todos los colectivos de padres y madres del núcleo, además de la Federación Comarcal de Ampas de la Costa del Sol. Los padres también denuncian la pérdida de espacios como aulas específicas, salones de actos, bibliotecas o gimnasios, situación que se ha agravado especialmente este curso por la pandemia, según explicaron.“Los niños no pueden estar metidos en clases amontonados a escasos centímetros, eso no es calidad, eso no es cantidad, eso es un problema casi de salud pública”, dijo Miguel Gallardo, presidente de la federación.

La concentración finalizó con la lectura de un manifiesto en el que reivindicaron, ante todo, una enseñanza de calidad y digna, “que es lo que se merecen nuestros hijos”, concluyeron los colectivos de padres y madres de alumnos de La Cala.

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