Después de dos años de intenso trabajo, la Escuela Taller Parque Periurbano El Esparragal ha llegado a su fin. 44 jóvenes desempleados, menores de 25 años, se han formado en cuatro módulos: trabajos forestales, mantenimiento de jardines, estructuras metálicas y carpintería.
Han sido muchos meses de aprendizaje, tanto teórico como práctico. Ahora, los jóvenes miran hacia el futuro con esperanza de encontrar un buen trabajo, aunque tal y como está la situación económica actual, saben que hay que ser realistas.
“La verdad es que ha sido una experiencia muy buena, hemos aprendido mucho y ahora a ver si tenemos suerte de encontrar trabajo”, opinó Adrián García, alumno del módulo de Trabajos Forestales.
La jornada de clausura ha tenido lugar en el Centro de Formación, Empleo y Juventud y, tal y como se preveía, ha estado cargada de emociones. Uno a uno, los jóvenes han recogido, orgullosos, su diploma.
“Además de trabajar mucho, también nos hemos divertido y hemos hecho mucho amigos”, destacó Inés Criado, alumna de Mantenimiento de Jardines. Y es que el compañerismo y el buen ambiente ha estado presente durante los dos cursos.
Durante la entrega de diplomas, los jóvenes han recibido el aliento de las instituciones porque salen al mercado laboral, “muy bien preparados”, aunque el panorama es complicado. “Hoy es un día muy feliz y estoy muy contenta y orgullosa de esta escuela taller; los alumnos han hecho un gran trabajo y están ahora muy bien preparados para salir al mercado laboral”, comentó la concejala de Fomento de Empleo del Ayuntamiento de Mijas, Lourdes Burgos.
También ha mostrado su satisfacción el equipo docente que califica de sobresaliente el trabajo del alumnado. “La verdad que, para algunos alumnos que nunca antes habían trabajado en el campo, ha sido duro trabajar muchas veces a cuarenta grados o con mucho frío y realizando tareas muy duras”, ejemplificó Fernando Nadal de Diego, Monitor de Trabajos Forestales.
En cuanto a los objetivos de la Escuela Taller, según la directora, Carmen Méndez, se han cumplido con creces. Además de fomentar la inserción laboral, el objetivo era adecentar el parque El Esparragal.
“La verdad es que el parque ha cambiado mucho; se ha acondicionado, se ha creado un carril bici y se ha dotado de equipamiento urbano y zonas verdes y, también, se ha recuperado la cubierta vegetal autóctona de la ribera del río Fuengirola”.
Durante una visita al parque, los responsables políticos, los técnicos, el equipo de docente y todo el alumnado contemplaron el resultado de tanto esfuerzo. Gracias a la escuela taller, ahora El Esparragal es un gran parque de unos 12.000 metros cuadrados medioambientalmente recuperado.
Ahora, el Ayuntamiento de Mijas espera que el año que viene Mijas vuelva a recibir financiación para poner en marcha una nueva escuela taller. “No entendemos cómo no nos han concedido una escuela taller a un municipio como el nuestro que es referente en este ámbito.
Creo que se debe a criterios políticos, porque hay municipios mucho más pequeños que sí han recibido financiación para una escuela taller. A ver si el año que viene tenemos más suerte”, puntualizó Lourdes Burgos, quien valoró la importancia de este tipo de iniciativas formativas porque, “entre otras razones, mejora la empleabilidad de jóvenes que ni siquiera cuentan con formación básica”.
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