La iniciativa consiste en crear un banco municipal de muestras de heces caninas de todos los perros del municipio. Para ello, sería necesario que todos los dueños de perros censados en Mijas facilitasen una muestra al Ayuntamiento, que “destinaría unos 100.000 euros para la creación de dicho banco”, según el PP. Así, cuando se localice el excremento en la calle, se remitiría una muestra a un laboratorio para determinar el ADN del animal, de tal forma que se pueda identificar al dueño.

Los populares exigen saber cuáles son los planes del equipo de gobierno para erradicar esta práctica, que, aseguran, suele ser una de las “principales quejas de muchos vecinos”.

El edil del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Mijas Juan Carlos González afirma que “siendo concejal de Sanidad inicié este tema y hablamos con otros municipios en los que ya se ha implantado, como es el caso de Málaga”.

González manifiesta que “ya no solo son los olores, la mala imagen que dan y la suciedad que ocasionan el no recoger la caca del perro, sino que también genera inseguridad. Conocemos varios casos de vecinos que se han caído por pisar una caca que han acabado en fracturas y otras lesiones. Hay que acabar con esta práctica incívica e insalubre lo antes posible”.

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