El futuro del Parque Empresarial de Mijas (PEM) ha dado esta semana un giro de 180 grados. Tras meses, incluso años, sin recibir buenas noticias, los más de 230 empresarios que integran este proyecto empiezan a ver la luz al final del túnel después de que el pasado jueves, día 5, saltara a la prensa la noticia de que el Tribunal Supremo declaraba nulo de pleno derecho el Plan de Ordenación del Territorio de la Costa del Sol Occidental (POT sub C). Y es que ello “supone la desprotección del suelo de La Atalaya, hasta ahora calificado como de alto valor medioambiental”, como explicó a este periódico el concejal de Urbanismo de Mijas, Andrés Ruiz, y, por tanto, el desbloqueo de una iniciativa que comenzó su andadura en el año 2002, pasando durante todo este tiempo por innumerables altibajos.
“Llevábamos mucho tiempo esperando noticias positivas y ahora parece que vuelve a existir posibilidades de que el PEM salga adelante”, expresó el presidente del proyecto, Francisco José Bravo, tras la reunión celebrada el día 11 en el Parlamento Andaluz y a la que asistieron el alcalde de Mijas, Juan Carlos Maldonado; el edil de Urbanismo, Andrés Ruiz, y la parlamentaria andaluza por Málaga de Ciudadanos, Irene Rivera, quien se comprometió a plantearle el proyecto a la Comisión de Ordenación Territorial de la Junta de Andalucía para “desbloquearlo”. Según Rivera, “cuando se trata de reactivar el empleo, no se deben poner trabas y desde nuestro partido haremos lo posible para que, como oposición constructiva que somos, el PEM salga adelante”. “Se trata de preservar unos 2.000 puestos de trabajo y generar otros 500 de forma directa. El PEM es una prioridad absoluta para la Corporación municipal porque viene a darle a Mijas la estabilidad que necesitamos. Debemos seguir creciendo y generando empleo y con el parque empresarial nos convertimos en el centro neurálgico de la Costa del Sol y un referente a nivel económico, empresarial y de innovación”, apuntó el primer edil.

¿Y ahora qué?
En cuanto al procedimiento a seguir para dar viabilidad al PEM, como explicó Ruiz, “ahora hay que revisar el proyecto, ya redactado y aprobado en su día, para hacer las modificaciones necesarias para adaptarlo a la realidad vigente”. Una vez el proyecto cuente de nuevo con el visto bueno, añadió el alcalde, la solución pasa por aprobar en Pleno una modificación de elementos de los terrenos adquiridos por los comuneros en La Atalaya (1.560.000 metros cuadrados en la finca con una inversión de más 7 millones de euros). Así el terreno pasará de ser suelo no urbanizable común, pero sin protección especial, a tener la calificación de suelo industrial. “Finalmente”, concluyó el edil de Urbanismo, “habrá que proponerlo para su aprobación a la Delegación de Ordenación del Territorio y del Medio Ambiente, dependiente de la Junta”. En cuanto a plazos, Maldonado explicó que “es difícil dibujar un escenario a corto plazo”, aunque, “hemos cogido el toro por los cuernos y ahora se están dando circunstancias favorables para que de una vez por todas la Junta sea capaz de sacar adelante el parque empresarial en este mandato”. “El PEM cumple ahora todos los parámetros para ser viable”, añadió Ruiz. Mientras que Bravo insistió en que “es increíble que llevemos 13 años esperando para generar empleo. Es incomprensible, pero esperemos que este cambio llegue a buen puerto”, recalcó el presidente del PEM. En definitiva, 13 años de lucha incansable por parte de más de 230 empresarios mijeños, muchas promesas incumplidas y, ahora, un nuevo panorama urbanístico que parece que dibuja un futuro esperanzador es la historia que podría resumir la trayectoria del Parque Empresarial de Mijas.

“Es increíble que llevemos 13 años esperando para generar empleo”
De los 235 empresarios que empezaron integrando este gran proyecto empresarial e industrial de Mijas en 2002, algunos se han quedado en el camino. “Han fallecido desgraciadamente ocho personas en este tiempo y algunas empresas han desaparecido con la crisis”, apuntó el presidente del Parque Empresarial de Mijas, Francisco José Bravo. Durante todos estos años, han sido muchos los cambios que ha ido sufriendo el proyecto, promesas incumplidas por parte de los políticos, cambios en las normativas, en el panorama urbanístico... “muchos desánimos”, relata el empresario y presidente del PEM desde el mes de abril. Pero lo cierto es, confesó, que este cambio “ha sido un revulsivo para todos los empresarios, para ver el futuro de otro color. También parece que la economía en general está mejorando y eso ayuda”. En cuanto a las posibilidades de implantación del PEM que, en algunas ocasiones hasta se ha llegado a cuestionar, “tenemos incluso una larga lista de espera de empresas interesadas en sumarse al proyecto”, aseguró. “El Parque Empresarial de Mijas, como su nombre indica, no es un polígono”, detalló Bravo. Se trata de un proyecto empresarial de “enorme envergadura, donde tienen cabida todos los sectores y hay terreno para todos. Para los empresarios mijeños y los de la comarca. Ubicado además en un área estratégica entre el interior y la costa. Y vamos a trabajar para que sea un referente”, aseguró.  

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