El tiempo en Mijas

Viernes 22/11/2024

Actualidad

En el buen camino

“Optimismo responsable”. Estas palabras no equivalen a recuperación, a la salida de la crisis ni a creación de empleo, pero algo es algo. La expresión fue pronunciada ayer en Málaga por Isidro Fainé, presidente de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE), en el marco de la jornada anual de esta organización, que reunió a más de 1.500 directivos españoles en el Palacio de Ferias y Con

La evolución favorable de las exportaciones, la importante reducción de la prima de riesgo y el acceso más cómodo a los mercados para colocar deuda son síntomas de que algo está cambiando y que lo hace a mejor “Optimismo responsable”. Estas palabras no equivalen a recuperación, a la salida de la crisis ni a creación de empleo, pero algo es algo. La expresión fue pronunciada ayer en Málaga por Isidro Fainé, presidente de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE), en el marco de la jornada anual de esta organización, que reunió a más de 1.500 directivos españoles en el Palacio de Ferias y Congresos de la capital.


El 29 de octubre el Instituto Nacional de Estadística (INE) confirmó lo que días atrás ya anunció el Banco de España: la salida de la recesión técnica de nuestro país al crecer el Producto Interior Bruto (PIB) un 0,1 % en el tercer trimestre. Decíamos de este modo adiós a la recesión más larga de la era democrática. Desde que estalló la crisis, hemos pasado dos veces por este trance, entre el tercer trimestre de 2008 (la primera vez en quince años) y el primer trimestre de 2010 y se repitió poco después, exactamente, a partir del tercer trimestre de 2011 hasta hace unos días. Mirar a la recesión por el espejo retrovisor y no tenerla sentada en el asiento del copiloto es un alivio, aunque se trate solo del principio del inicio de la recuperación, como bien han explicado los directivos de CEDE. Otra noticia alentadora llega de la mano del Eurogrupo, que ha acordado poner fin al rescate bancario para España. La eurozona considera que el plan de ayuda ha sido un éxito y que ha cumplido su objetivo de reestructurar el sector financiero.


La evolución favorable de las exportaciones, la importante reducción de la prima de riesgo y el acceso más cómodo a los mercados para colocar deuda, tanto del Tesoro como de las empresas privadas, son síntomas de que algo está cambiando y que lo hace a mejor. Realidades que dan fuerza al vaticinio del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy: “Los indicadores económicos muestran que la recuperación está ahí”.


Pero como ya dijo Isidro Fainé, el optimismo debe ser cauteloso y recuerda que quedan retos pendientes de vital trascendencia y el mayor de ellos es, sin duda, generar empleo y que las familias noten en sus hogares que soplan nuevos y mejores vientos. La receta del directivo para las empresas consiste en que innoven para que logren diferenciarse, ganen tamaño y refuercen su internacionalización, esto les ayudará a buscar fuera la demanda que no encuentran dentro de nuestras fronteras. Fainé también valoró el papel de los directivos líderes en la salida de la crisis a los que pidió “innovar en lugar de administrar, desarrollar y no limitarse a mantener, centrarse en las personas y no en los sistemas y estructuras, tener una perspectiva de largo alcance y no una visión cortoplacista, poner en tela de juicio la situación de las cosas y no limitarse a aceptarlas, inspirar confianza y conseguir que sus colaboradores confíen en sí mismos”. Esto suena bien, pero hay que aplicarlo y ponerlo en marcha, al igual que uno de los mantras escuchados en esta jornada anual de CEDE: los agentes económicos, políticos y sociales deben seguir esforzándose para que la recuperación sea una realidad.


Mirar a la recesión por el espejo retrovisor y no tenerla sentada en el asiento del copiloto es un alivio, aunque se trate solo del principio del inicio de la recuperaciónEn este encuentro de directivos se han dado cita otras personalidades, como el expresidente del Gobierno Felipe González, quien ha vinculado la subida de los salarios a la productividad en dos terceras partes como clave para competir con los países emergentes en lugar de bajar los sueldos. Según González, “estamos tocando fondo, pero por responsabilidad tengo que decir que no sé cuánto tiempo vamos a estar en ese fondo. No veo en Europa políticas ágiles y efectivas”.
Las reflexiones oídas en Málaga por políticos como el expresidente socialista o el ministro Arias Cañete y de altos ejecutivos como Fainé o César Alierta son llamadas al optimismo, apelan al entusiasmo responsable y a ver el lado positivo de los sacrificios (siempre impopulares). Ahora hace falta que estos indicadores, que estas señales de esperanza terminen de engrasar la maquinaria y comience bajar las dramáticas cifras del paro.  

Comparte esta noticia desde el siguiente enlace: https://mijascom.com/?a=5867

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai