Comenzó el presente mandato como concejala del equipo de Gobierno, cargo que abandonó a los pocos meses “por desencanto de la política y coherencia con sus ideas”. Ahora, como edil no adscrita, su principal aspiración es dar voz a las demandas vecinales y seguir luchando por su pueblo, principalmente en áreas relacionadas con la tercera edad y la participación ciudadana. Antonia Núñez, concejala no adscrita del Ayuntamiento de Mijas.

Mijas Semanal. Estamos en el ecuador del mandato, ¿qué balance hace de estos dos últimos años?
Antonia Núñez. Creo que no se están abordando los principales problemas de este pueblo, como el parque empresarial o las viviendas irregulares. No hay centro de día para los mayores de Las Lagunas, ni iniciativas para la juventud, el paro sigue subiendo, y la Renta Básica no sirve, ya que hay que encontrar la manera de que las personas puedan tener un futuro más estable. En cambio, las cuestiones de limpieza están muy bien hechas, al igual que el tema de Hacienda, puesto que se están cobrando muchas cosas retrasadas, poniendo orden en los papeles y declarando muchos edificios. Hay un desbarajuste de departamentos municipales, con el traslado, por ejemplo, del área de Extranjeros; tenemos un hipódromo arruinado y, aunque se están haciendo muchas reformas, hay algunas que no valen para nada, como la del cuartel de la Guardia Civil y La Baraka.
La limpieza y la gestión económica son los asuntos que, según Núñez, han mejorado con el mandato de NozalM.S. En su día a día, ¿qué sensaciones le hacen llegar los vecinos?
A.N. A mí me funciona más el corazón que el cerebro. El contacto con el ciudadano es muy importante, son ellos los que vienen a contarme sus cosas. Me dicen que no me aburra y que siga defendiendo a los mijeños. En su momento, me reprocharon mucho que dejara el equipo de Gobierno, porque dicen que era la única que hacía algo por el pueblo. Yo, sin embargo, tomé la decisión muy tranquila y, con el paso del tiempo, muchos dicen que me entienden.
M.S. ¿Cómo valora el papel de la oposición en el Ayuntamiento?
A.N. Estar en la oposición quema muchísimo y, por eso, entiendo que no se quieran meter en demasiadas polémicas. Alternativa  Mijeña tiene sus ideas y se suelen mantener en su línea. A Tovar le pasa como a mí, que estamos solos y, de cara a los plenos, nos tenemos que preparar todos los puntos cuando los demás se los reparten, además de dar voz a las demandas del vecino. El resto de la oposición, creo que se está resguardando mucho porque aún quedan dos años de mandato.
M.S. ¿Se siente satisfecha de la gestión que pudo desempeñar en el equipo de Gobierno?
A.N. Sí, aunque me dejé muchas cosas sin terminar. El centro de mayores de Las Lagunas tenía su presupuesto hecho, era de 40.000 euros; sin embargo, se han gastado en exponer las portadas del Diario Sur, en vez de acondicionarlo. Algunos mayores se ven obligados a subir a Mijas, cuando podían estar cerca de casa en un espacio con cocina, lavandería y un gran gimnasio donde se les iba a dar rehabilitación, con una zona para talleres, baños adaptados y un salón para el descanso.
M.S. Sin embargo, sí pudo concluir otros proyectos.
A.N. La verdad es que sí. Reformé la Universidad Popular de Mijas Pueblo, al igual que el consultorio. Además, hice todo lo posible por que el centro de mayores de La Cala pudiera inaugurarse en la fecha prevista. Asimismo, propuse que la feria de día de Mijas Pueblo se celebrara en La Muralla, ya que tenemos algunos de los entornos más bonitos del municipio. Pusimos una cabina para las madres que iban con bebés y fue una iniciativa que funcionó y sigue funcionando.
El centro de mayores de Las Lagunas es, en palabras de la edil, un proyecto que le hubiera gustado concluir antes de salir del equipo de GobiernoM.S. ¿Se arrepiente de estar en la oposición?
A.N. Cada día estoy más contenta de haber dejado el equipo de Gobierno. Empecé a ver contradicciones, que no se hacían las cosas que se habían prometido y, por más que yo trabajaba, siempre se torcía lo que estaba haciendo y era yo la que tenía que dar la cara ante el ciudadano. Así ocurrió cuando, a pesar de que los jubilados decidieron destinar el dinero del almuerzo de Navidad a Servicios Sociales, se terminó organizando la comida. El tiempo ha demostrado que el equipo de Gobierno no escucha, como puso de manifiesto el asunto de la semipeatonalización del pueblo, aparte de que no consigue movilizar a las asociaciones. Tampoco estoy de acuerdo con que haya tantos asesores; hay que contratar a la gente por su capacidad, mérito y trabajo. Cuando entraron los dos ediles del Grupo Independiente, vi que no existía coherencia ninguna y fue la ocasión perfecta para irme. No se puede dejar a todo un pueblo sin luces de Navidad y que haya dos concejales más cobrando 55.000 euros al año. A la gente le duelen mucho sus fiestas y tradiciones.
M.S. ¿Cómo ve el panorama político dentro de dos años?
A.N. Creo que va a haber un cambio, pero también a nivel nacional. La política necesita una reestructuración, estos bipartidismos se tienen que acabar. En el ámbito local, ya se han interesado por mí otras candidaturas, pero no creo que acepté ya que nunca he sido política, sino activista social. En cambio, si hubiese un movimiento del pueblo para el pueblo sano, fuerte y joven, yo me uniría a él.

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