La torre de Calypso, un antiguo aljibe de agua en altura en desuso desde hace años, ha comenzado hoy (20 de noviembre) a ser demolida por los Servicios Operativos del Ayuntamiento de Mijas, culminando así una antigua aspiración vecinal.

El derribo de la torre, que era uno de los compromisos electorales del alcalde Ángel Nozal, se está haciendo de forma manual, ya que los técnicos municipales descartaron el empleo de cualquier otro método, habida cuenta la cercanía de viviendas.

De los trabajos se encargan seis empleados de Servicios Operativos, dotados de las preceptivas medidas de seguridad, con el apoyo de dos camiones, uno de ellos de tipo pluma. El perímetro de la torre ha sido debidamente acotado para evitar que los trabajos pongan en riesgo la integridad de los transeúntes y la actuación se prolongará durante, al menos, doce días.

El equipo de gobierno ha dado instrucciones a los técnicos municipales de proyectar en la zona un pequeño jardín, una vez concluya el proceso de demolición, así como prolongar el acerado.

El alcalde de Mijas, Ángel Nozal, se mostró satisfecho de la actuación, porque “es un edificio que no es bonito, los vecinos lo consideran un mamotreto, y no había forma de poderlo mantener”.

El regidor señaló que el proceso para iniciar la demolición del viejo aljibe comenzó nada más asumir el actual mandato municipal: “hemos encontrado una fórmula y hemos conseguido el permiso de las subcomunidades que conforman la Urbanización Calypso".

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