Tercer y penúltimo día del Viaje de Mayores organizado por el Ayuntamiento de Mijas en Huelva. Nuestros mayores, con pena, ya empiezan a despedirse de las tierras onubenses. Eso sí, aún les quedan unas cuantas excursiones por compartir y alguna que otra comida en el hotel de Matalascañas. Este jueves también comenzó temprano, con los participantes llenos de energía e ilusión. Como cada mañana, el grupo disfrutó de un completo desayuno antes de partir hacia las diferentes visitas previstas para esta jornada.

De nuevo divididos en pequeños grupos, algunos madrugadores se dirigieron a la aldea de El Rocío para recorrer sus típicas calles de arena y visitar el santuario de la virgen, mientras que otros pusieron rumbo al Parque Nacional de Doñana, donde pudieron contemplar la belleza natural del entorno. Otros han podido disfrutar de un crucero por la ría de Huelva con una degustación de gambas, queso y vino del Condado.

Otros viajeros visitaron la ciudad de Huelva, recorriendo lugares emblemáticos como la Casa Colón o el monumento a la Virgen del Rocío. Y ellos están pues “todos muy contentos, les está gustando muchísimo. Están aprovechando todo: el hotel, las excursiones, el ambiente… Nadie se quiere quedar atrás, todos quieren hacerlas, están los autobuses llenos”, señaló Fran Gallardo, responsable de la agencia Azulmarino, que acompaña a los mayores durante el viaje.

Por su parte, Luis Vasco, uno de los participantes, expresó que “hoy hemos conectado con la historia de España. Estar en las Carabelas y en el monasterio de La Rábida te hace pensar en cómo aquellos marineros se lanzaron a lo desconocido. Mereció la pena, porque abrieron el camino a lo que somos hoy”. Vasco también quiso destacar el valor de estas experiencias: “estos viajes son maravillosos. Muchas personas no tendríamos la posibilidad de conocer sitios así si no fuera por esta iniciativa del Ayuntamiento de Mijas. Cada vez lo pasamos mejor y disfrutamos mucho”.

El entusiasmo se palpaba en cada rincón. Josefa Rojas, otra de las viajeras, que visita Huelva junto a su marido Cristóbal, comentó entre risas que “me encanta el viaje. El barco, el hotel, el grupo… todo me encanta. Nos lo estamos pasando genial. Qué pena que mañana sea el último día, ojalá no se terminara nunca”.

Con muchas ganas de vivir lo que todavía les depara Huelva, los mayores encaran su penúltima jornada con ganas de seguir disfrutando de esta experiencia.

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