Con la salida procesional, en primer lugar, de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Paz, María Santísima de la Soledad y San Juan Evangelista y, a continuación, la salida en procesión del Santo Sepulcro, el Viernes Santo es siempre uno de los momentos álgidos de la Semana Santa en Mijas Pueblo  Debido a la previsión de lluvia ambas cofradías recortaron su recorrido y aunque en los últimos metros empezó a llover, ambos tronos pudieron completar sus recorridos, este año idénticos.

La procesión del Cristo de la Paz se trata de un paso muy esperado por los vecinos y visitantes, en la que es la conmemoración más representativa y profunda del cristianismo, y en la que se recuerda la crucifixión y muerte de Jesús de Nazaret.​​​

A las 19 horas en punto, hizo la salida el trono con los tres Santos Titulares desde el salón de tronos de la Parroquia de la Inmaculada Concepción para iniciar su recorrido habitual con el toque de campana de honor por parte de la alcaldesa de Mijas, Ana Mata (PP).

Este año la Hermandad del Santísimo Cristo de la Paz tuvo dos estrenos: la parte trasera del trono de la capilla con una imagen de la Inmaculada y el fajín de la Virgen, obsequio de la Banda de Música de Marbella que un año más, dirigida por José Sánchez, hizo el acompañamiento musical.

El tiempo acompañó durante todo el paso, de manera que la procesión lució en su máximo esplendor durante las dos horas y media que duró. La corporación municipal, con la alcaldesa a la cabeza, presidió el cortejo procesional y han sido muchos los vecinos y visitantes los que no han querido perderse esta estampa tan tradicional. 

Valoraciones 

“De las circunstancias meteorológicas también se sacan circunstancias muy especiales y positivas, ya que estamos viviendo una noche muy especial en Mijas Pueblo con los dos tronos en la calle al mismo tiempo”, expresó la primera edil. Mata manifestó que “la Semana Santa de Mijas es una de sus tradiciones más bonitas que tenemos. Para mí, y he tenido la oportunidad de ver muchas semanas santas, la de Mijas, por sus calles y su solemnidad, es una semana santa única”.

El concejal Juan Carlos Cuevas (Vox) se mostró “muy emocionado y muy afortunado de poder disfrutar de la Semana Santa de Mijas. “Para mí eso es una gran responsabilidad, mis tradiciones para mí es lo principal, es un honor estar aquí y estoy disfrutando del pueblo”. 

Momentos emotivos

70 hombres y mujeres llevaron el trono, con Jorge Leal como capataz de trono y, en la parte trasera los capataces Cristóbal Villar y Paco León velaban por el paso. El recorrido del Cristo de la Paz tuvo diversos momentos especiales. El paso complicado por la calle Los Caños fue muy bonito y especialmente emotivo fue cuando el trono se puso frente a la casa de la hermana mayor, María Jesús Torres, que este año no pudo salir por encontrarse enferma. Aún así, ella salió al balcón a ver a sus titulares pasar y recibió el saludo cariñoso de sus hermanos. 

De regreso por la multitudinaria plaza de la Constitución también se vivió una imagen muy bonita. De un lado el trono del Santísimo Cristo de la Paz y del otro, en sentido contrario, el trono del Santo Entierro. “Es una procesión preciosa, con mucho encanto”, comentaban unos turistas de Valladolid. “Menos mal que han podido salir”, decía algunos vecinos, muy pendientes del cielo en todo momento. 

Como cada año, los nazarenos que acompañaban al Cristo, en torno a 85,  vistieron túnicas de tergal de color crema, cíngulo y capuces negros. También muchos niños acompañaron el trono como señal de que en esta hermandad todos son como una familia. Y no faltaron tampoco las mujeres de mantilla, aportando elegancia y sobriedad a la noche del Viernes Santo.

A las 21.30 horas, cuando justo empezó a llover, entre aplausos se encerró rápidamente con paso acelerado el trono con sus Sagrados Titulares de nuevo en el salón de tronos de la Parroquia de la Inmaculada.

“Estoy muy emocionado la verdad, creo que ha salido una procesión bonita, y doy las gracias a todos los miembros de la hermandad y al pueblo entero”, expresó el capataz del trono, Jorge Leal, al término del paso.  “Nos ha acompañado mucha gente y el tiempo nos ha respetado y desde ahora ya estamos pensando en la procesión del año que viene, porque dentro de 364 volvemos a estar en la calle”, finalizó mientras se abrazaba a los compañeros. 

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