Se trataba de la quinta edición de esta fiesta, una cita que ya no puede faltar en el programa de ocio estival de Mijas. La Noche Blanca de la Asociación de Vecinos María Barranco se ha convertido en un evento al que, cada año, acude más gente y no solo del barrio lagunero. Así lo afirmó la presidenta del colectivo, Susana Ortiz, quien destacó que “la gente sale muy contenta, dice que nos lo curramos mucho, que está muy bien; esto lo hacemos para la gente del barrio, la familia y los amigos, para que se diviertan, la verdad es que lo pasamos bien”.

Ataviados de blanco, los asistentes se lo pasaron el grande. No faltó la música, cócteles, algo de comida y alguna que otra sorpresa. Tampoco, las fotos para el recuerdo.

Algunos miembros de la corporación municipal asistieron a este evento, mucho más que una fiesta, una jornada de esas de las que hacen barrio, que demuestran que estos vecinos no solo viven aquí, sino que también conviven. “Hacen que el barrio no solo sea un sitio donde duermo, voy y salgo corriendo para ir a trabajar, sino que aquí hago vida, los niños juegan en la calle, me preocupo por el vecino, demuestro afinidad con mi entorno y eso es hacer pueblo en el propio barrio”, señaló el concejal socialista Hipólito Zapico. También acudió a la cita la edil del PP Melisa Ceballos, quien dijo que “la fiesta, como todos los años, es inmejorable, todos vestidos de riguroso blanco, siempre lo pasamos genial”.

Esta velada ya se ha convertido en un clásico más del calendario festivo de esta asociación, que sabe mantener vivas las tradiciones de la tierra y acoger las nuevas, como Halloween.

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