Las alumnas del taller de tapices de la Universidad Popular inauguraron el pasado viernes 19 su exposición de fin de curso en la Casa de la Cultura de Las Lagunas. Una muestra compuesta por 24 piezas y que se podrá visitar hasta el próximo 29 de mayo. La elaboración de un tapiz es una tarea que requiere de mucho tiempo y paciencia. Para confeccionarlos es necesario llevar a cabo una serie de pasos: los artesanos deben pasar hilo por hilo sobre el tafetán y una vez hecho montarlo.
“Algunas veces son tapices grandes aunque también hay otros más pequeños y están hechos, la mayoría, con lana 100% pero también le metemos macramé”, explicó la profesora de esta actividad, Beatriz Mozún. En este taller, que cuenta con alrededor de 40 alumnas, participan mujeres de 89, 90 y hasta 97 años, como es el caso de Josefina Celada. Y es que se trata de un arte que sirve, además, como herramienta terapéutica. Celada contó que su tapiz “lo he hecho basándome en una foto. La imprimí en papel y lo he ido haciendo con los hilos para arriba y para abajo. Por supuesto me ha ayudado la profesora, sino no hubiera hecho todo”.
En algunos casos, como el de la alumna Luisa García, llevan años trabajando en sus elaboraciones: “he tardado bastante tiempo en hacerlo porque cuando comencé coincidió con la COVID, entonces no vine ni en 2020 ni en 2021. Lo tenía a medias y este año ya lo he terminado”. Son obras que aunque no son difíciles de hacer requieren muchas horas, a veces casi 300. “No hay nada que sea difícil. Solo tienes que tener paciencia para hacerlo y si te sale mal deshacerlo. Lleva mucho trabajo porque tienes que tener mucha paciencia y no puedes hacerlo rápido. Tienes que ir haciendo el tapiz todo en una línea e ir igualando”, concluyó la alumna María José Vicent.
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