La Renta Básica continúa con su labor en todo el término municipal de Mijas, muchos de los trabajos, van destinados a una limpieza que evitará posibles conatos e incendios en las zonas rurales, como los que se llevan a cabo estos días en las urbanizaciones próximas al Hipódromo Costa del Sol.
En algunos casos, la maleza invadía prácticamente todo el acerado, haciéndolo impracticable, lo que, a su vez, suponía un peligro de cara al verano por posibles incendios. Con la llegada de los trabajadores de la Renta Básica, no solo se elimina un problema existente desde hace muchos años, sino que también se mejora la imagen de Mijas.
Aludiendo a las áreas en las que ahora se trabaja, en palabras de la concejala de Fomento del Empleo, Lourdes Burgos, “Mijas es muy grande, no es solo los tres núcleos, Mijas son los 147 kilómetros cuadrados que tenemos en el municipio y hay muchas zonas con una gran cantidad de maleza que hay que limpiarla”.
Una tarea cuyos beneficios turísticos ha destacado Burgos, “queremos mostrar unas condiciones estupendas para que la gente también quiera venir a vivir aquí y tengamos trabajo todos”.
Tampoco ha querido olvidarse la edil de Fomento del Empleo de la ayuda que esta Renta Básica supone para los desempleados que ahora optan a ella, “levantarte un día y otro sin tener una obligación es muy duro, pero ahora, además de tener una obligación y un trabajo remunerado, están haciendo cosas por su pueblo”.
Hablamos por tanto de una iniciativa cuya finalidad no culmina en mejorar el aspecto de Mijas, sino en optimizar los recursos económicos en la actual situación de crisis.
En este sentido, Mario Bravo, concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Mijas, ha destacado que “una cosa positiva de la crisis es que nos está obligando a sacar a todos el máximo partido a los recursos disponibles. Y el fruto de esa política de ahorro y de administrar bien el dinero público, es lo que nos permite dedicar en principio dos millones de euros anuales a este programa de la Renta Básica”.
Asimismo, Bravo ha recordado que a raíz de este esfuerzo económico que hace el Ayuntamiento, “no debemos olvidar que estas personas cobran 500 euros mensuales, ese dinero se lo gastan en la panadería, en la zapatería o en pagar la hipoteca, no es un dinero tirado, es un dinero invertido en la parte de la sociedad donde más hace falta”.
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