I.Pérez. La ONCE, en colaboración con la Fundación Lego, ha iniciado el reparto de los primeros lotes de piezas de LEGO en Braille para niños con deficiencia visual de entre 3 y 10 años. En la provincia de Málaga se han distribuido un total de 57 kits y uno de ellos ha ido a parar a Dylan, un alumno de 4 años del CEIP El Olmo (La Cala) que, aunque parece que no lo va a necesitar, ya ha empezado a familiarizarse con este sistema de lectoescritura.
El lote se compone de 250 piezas de Lego con una particularidad: todas las fichas incluyen el alfabeto, los números, los signos telemáticos y los signos de puntuación en Braille. “Es verdad que actualmente existen muchas aplicaciones y programas para poder leer textos de manera sencilla pero es bueno que las personas que tenemos deficiencia visual conozcamos los aspectos básicos de este sistema de lectoescritura, porque no sabemos si algún día podremos necesitarlo”, indicó este martes Irene García, directora de la Agencia ONCE en Fuengirola y Mijas.
En el caso de Dylan, el pequeño nació con cataratas y a los seis meses se sometió a su primera operación ocular. Desde entonces, y de manera semanal, recibe apoyo educativo por parte de la ONCE para aumentar su autonomía y su autoestima. Y a pesar de su corta edad, solo cuatro años, la evolución que ha experimentado ha sido muy notable. “Hemos notado que, poco a poco, ha ido recuperando parte de su vista, sobre todo por las gafas que lleva, que van muy bien. Es un niño muy obediente en casa y en el colegio, gracias a sus profesores y al personal de la ONCE”, valoró Jason Echeverri, padre de Dylan.
También coincidió en este aspecto Manuel Álvarez, director del CEIP El Olmo, quien aseguró que “Dylan es un niño que, desde el primer día, se integró muy bien en el centro, y tanto sus compañeros como los docentes lo han acogido estupendamente”.
Herramienta de apoyo
Por el momento, Dylan no necesita ampliar tintas ni aprender este sistema de lectoescritura para desenvolverse en su día a día, pero este conocido juego sí que le permitirá desarrollar diferentes competencias cognitivas y habilidades visuales. “Con las piezas podremos trabajar la orientación, hacer seguimientos, copiar modelos, practicar la motricidad fina, las construcciones… Son aspectos muy importantes para entrenar el sistema visual, la atención y la memoria. Y lo más importante es que podrá hacerlo junto a sus compañeros, favoreciendo la inclusión”, explicó Carmen Soler, maestra especialista que atiende a Dylan y otros alumnos de la zona con discapacidad visual.
La ONCE y la Fundación Lego han repartido casi 600 lotes de este tipo en toda España. En solo un año, la iniciativa se ha promovido en hasta 20 países después del arranque piloto en Estados Unidos.
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