La concejala de Educación, Carmen Márquez, ha denunciado hoy que algo más de 600 niños de Mijas están esperando a que el Gobierno Andaluz les asigne una plaza en los distintos comedores escolares de los colegios e institutos mijeños. Una situación que la responsable municipal ha achacado a la falta de previsión y disposición de la Junta de Andalucía a plantear una verdadera conciliación entre la vida familiar y laboral.

"Es un problema bastante grave y que afecta, sobre todo, a los alumnos de Primaria. Para las familias es muy difícil conciliar la vida laboral y familiar si no tienen a sus hijos en el comedor, ya que en muchas de estas familias con niños en listas de espera trabajan tanto el padre como la madre", explicó la edil.

En este sentido, la responsable municipal aseguró que muchas de las familias en lista de espera "están dispuestas a pagar el coste del servicio a la Junta". Por ello, Márquez añadió que "las listas de espera son un problema que hay que afrontar y solucionar, por lo que no podemos entender cómo el Gobierno Andaluz sigue sin responder y no se pone manos a la obra".

La lista de espera para acceder a este servicio el pasado curso escolar ascendía a 442 niños. Para el presente, la demanda ha crecido por encima de los 300 alumnos, por lo que la titular municipal de Educación cree "suficientemente acreditado que desde el Ayuntamiento insistamos a la Junta para que sea sensible y amplíe las plazas de este servicio".

A colación de esto último, Carmen Márquez avanzó que el departamento de Educación está estudiando la viabilidad de crear un posible modelo de gestión de comedores escolares paralelo y compatible al existente. Se trata de una propuesta que ya fue presentada a las AMPA hace unos días en una reunión que mantuvo con sus representantes y que próximamente se detallará y consensuará con estas organizaciones para, si así lo desean, ponerlo en marcha de forma conjunta.

"El Ayuntamiento va a tomar la iniciativa en este asunto, en nombre de los padres y madres del municipio, para trabajar con la Junta para buscar la manera de implantar un modelo de gestión de comedores escolares. Creemos que es posible que las AMPA puedan gestionar las posibles ampliaciones de plazas en las mismas condiciones de seguridad y respeto a los responsables de los centros educativos", concluyó. 

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