El concejal de Áreas Rurales, Cristóbal González, ha estado hoy en el entorno del camino del Molinillo, en el diseminado de La Macorra, donde una cuadrilla de operarios de la Renta Básica está acometiendo labores de desbroce y limpieza para prevenir posibles incendios forestales.

“Llevamos trabajando todo el verano en varios diseminados. La lluvia de hace unos días no es suficiente para bajar la guardia y hay que seguir desbrozando y manteniendo el campo limpio porque el campo está muy seco y una chispa que salte puede suponer un problema muy serio”, explicó el edil.

Las labores se están centrando, como ya se venía haciendo en otras zonas rurales del municipio, en los márgenes de los caminos rurales hormigonados que se extienden por La Macorra, y en este caso por el entorno del río Las Pasadas. Es justamente en los arcenes, como recordó el responsable municipal, “donde se concentra la mayor parte de la broza y hierba seca así como restos de todo tipo, incluyendo colillas”.

Se da la circunstancia de que esta semana se celebra la verbena de la Asociación de Vecinos de La Atalaya-Macorra, por lo que González volvió a hacer un llamamiento al civismo a los usuarios habituales de los caminos rurales, “porque cualquier cosa que tiren al arcén puede hacer que antes o después pueda provocar fuego”.
 

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