Por fin parece remitir la plaga de medusas que durante la última semana ha mantenido en vilo a los usuarios de las playas de Mijas.

Durante los días en los que hemos recibido tan incómoda visita, se atendieron 444 casos por picaduras de este animal marino de un total de 465 intervenciones de la Brigada Socorrista, que se encarga del servicio de socorrismo y salvamento en nuestro litoral.

“La mayoría de los casos han sido leves, excepto dos que fueron más complicados porque picaron en el rostro y otra se metió en la boca de una persona mientras buceaba, entonces tuvo que asistir la ambulancia y la enfermera”, subrayó el jefe de Playas de esta brigada, Gabriel Martín.

Y es que las medusas no gozan de buena fama entre los bañistas. Las ‘aguascuajás’, como se las conoce popularmente, suelen venir cuando confluyen en nuestras costas masas de agua caliente, que es donde estas se desarrollan.

Es por ello que, si notamos que el mar está más cálido de lo normal, no está de más permanecer atento cuando nos bañemos. “Las buenas temperaturas las incitan a quedarse, pero no es algo estático ya que se mueven con las corrientes”, recuerda Martín, quien sostiene que los bañistas deben extremar las precauciones con la bandera amarilla y la de medusas ya que “es poco recomendable entrar en el agua”.

La picadura de la medusa, por lo general, no tiene más consecuencias que el ‘latigazo’ al entrar en contacto con ellas y una urticaria que puede persistir durante las siguientes doce horas. Sin embargo, si se trata justo después de producirse, nos ahorraremos varias horas de escozor.
Lo mejor es lavarse con una solución de agua, sal y vinagre, pero si no se tiene a mano, se puede usar “agua del mar y acudir a un puesto sanitario”, prosigue.

Los bañistas aseguraron que ayer jueves ya no había. “El día 15 no vimos ninguna en la playa”, comentó uno de ellos, el zaragozano Francisco Mostacero.
 

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