La formación escocesa Texas resurge tras ocho años de silencio con ‘The conversation’. Una mirada al pasado no exenta de nostalgia, que Sharleen Spiteri resuelve aportando nuevos aires a su sedosa voz.

Con siete álbumes editados y una respetable lista de éxitos a sus espaldas (‘I don’t want a lover’, ‘Say what you want’, ‘Summer Son’, ‘Black eyed boy’, etc.), el grupo de Glasgow alcanza sus 25 años de historia luciendo nuevo sonido.

En ‘The conversation’, Spiteri ha decidido dejar a un lado los aderezos electrónicos que emperifollaban sus últimos trabajos, para así recobrar sensaciones que parecían haber quedado sepultadas por el paso del tiempo.

La recuperación total de su insigne guitarrista Ally McErlaine, tras haber sufrido una hemorragia cerebral, ha devuelto al grupo buena parte de su alma.

Igualmente destacables son las influencias que proyectan a lo largo de la grabación los productores y guitarristas Bernard Butler (Suede) y Richard Hawley (Pulp).

Esta reinvención que está viviendo la banda se hace patente escuchando cualquiera de los 12 temas que componen el CD, empezando por ‘The Conversation’, el corte que ha servido de adelanto al disco.

Aunque más indicativo es ‘Dry your eyes’, una canción de sabor country pop, en la que se puede distinguir la firma de Hawley.

A medio camino entre dos colosos como ‘Southside’ y ‘White On Blonde’, se encuentra ‘Talk about love’, otro de los mejores momentos que encierra este trabajo, junto con el anterior track .

Reposando sobre elegantes y suaves sonoridades poperas llaman la atención ‘If this isn’t real’ y ‘Hid from the light’.

El espacio dedicado a las baladas no es muy extenso ni afortunado; de las tres canciones que se incluyen, solo merece atención ‘Maybe i’, un tema lento de estilo country creado para el lucimiento de McErlaine con su ‘slide guitar’ y la voz de Spiteri.

Todos los cambios conllevan su riesgo y Texas parece haberlos asumido con ‘The conversation’.

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