Coincidiendo con el Día Internacional contra el Acoso Escolar, el Teatro Manuel España de Las Lagunas acogió ayer la entrega de premios del I Certamen de Relatos Cortos ‘Por un mundo más tolerante, un mundo sin bullying’, puesto en marcha por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Mijas, que nace con el objetivo de concienciar y prevenir el acoso entre los más jóvenes en el ámbito escolar ya que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), uno de cada diez niños ha sufrido acoso escolar.
La alcaldesa de Mijas, Ana Mata (PP), que participó en la entrega de premios, consideró que se trata de algo "necesario", ya que es "hace falta visibilizar una realidad que sucede en nuestros centros educativos y de la que a veces no somos conscientes cuando salen a la luz noticias como la carta que aquí se ha leído. Como sociedad estamos obligados a prestar mucha atención a una parte tan esencial y vulnerable de la sociedad como son los niños y los jóvenes", dijo la alcaldesa, quién aseguró que el acto tendrá continuidad el próximo año. "Debemos trabajar todos juntos y esforzarnos para que estas situaciones no se produzcan e intentar llegar al mayor número de jóvenes posible", añadió la regidora. El certamen ha estado abierto a adolescentes de hasta 18 años de los distintos centros educativos mijeños.
Durante el acto se leyeron y premiaron los mejores relatos, recayendo el primer premio en la joven Ahitana Alamberi; el segundo en Juanjo Campos y el tercero en Ahmed Sadiki. También intervinieron la psicóloga y orientadora del CEIP Las Cañadas, Leonor Cuadros; el policía local y tutor Ángel Blanc; la madre de un niño acosado, Elena España y la presidenta de la Asociación 'No al Acoso Escolar' (NACE) con sede en Barcelona, Carmen Cabestany, que intervino a través de la proyección de un vídeo. También se proyectó el rap contra el acoso escolar 'Dile Stop!', escrito y producido por los alumnos de 4º de Primaria del CEIP El Olmo.
Al acto asistieron también los concejales de Cultura, Juan Carlos Maldonado (PMP) y de Policía Local, Juan Carlos Cuevas Dawson (Vox). Para el primero, el balance del concurso "ha sido muy positivo". "Hemos visto un nivel muy alto en los relatos y también queremos dar las gracias a todas las personas que han participado. No es fácil erradicar este tipo de lacra de nuestra sociedad por ello vamos a seguir trabajando para continuar ofreciendo las herramientas para poder acabar con él", ha dicho. Por su parte, Cuevas Dawson quiso recalcar algo: "los padres somos los responsables de enseñar a nuestros hijos y de hablar con ellos para saber si lo están viviendo en primera persona". Por último, el organizador del certamen, Francisco Romero, consideró que "el concurso es una muy buena forma de implicar a los jóvenes para que se expresen, se abran y cuenten sus historias. Pienso que el bullying no está suficientemente exteriorizado porque aunque todos sabemos lo que es, no conocemos lo que hay detrás".
Los relatos ganadores
Primer premio: Ahitana Alamberi
“El bullying es un tema del que se está hablando desde hace relativamente poco y que ahora consigamos darle visibilidad y no normalizar como se hacía antes me parece genial. Yo he sido víctima de acoso y desde mi propia experiencia puedo decir que se pasa muy mal, y aunque siga habiendo personas así, siempre va a haber alguien que te dé el apoyo que necesitas para seguir adelante”
Segundo premio: Juan José Campos
“Me ha gustado mucho participar ya que normalmente me suelo dedicar a leer libros y ví que era una oportunidad buena para poder dar mi opinión sobre este tema que, a día de hoy, sigue estando presente. Pienso también que debemos trabajar todos para que este problema desaparezca y que la gente que lo sufre de a conocer lo que supone”.
Tercer premio: Ahmed Sadiki
“Este certamen me parece muy bueno y bonito, ya que el bullying es un tema muy serio y se tienen que tomar medidas. Medidas como esta de concienciación a los niños a través de la escritura porque también es una forma muy interesante de pasar el tiempo”.
Un día para concienciar
El acto comenzaba con la lectura de una carta que escribió una niña de Bilbao a sus padres y que tras sufrir bullying el único camino que encontró para solucionar este problema fue el suicidio, un caso real que por desgracia no ha sido el último y que desde Mijas tratan de erradicar. El evento, además de dar voz a los tres mejores relatos y entregar los reconocimientos, contó con las ponencias de la psicóloga y orientadora del CEIP Las Cañadas, Leonor Cuadros, el policía local y agente tutor Ángel Blanc, la madre de un niño acosado, Elena España y la presidenta de la Asociación No al Acoso Escolar (NACE) con sede en Barcelona, Carmen Cabestany.
En su discurso, Leonor Cuadros los tres aspectos principales que giran en torno a este tema. “Por un lado la definición de acoso escolar, por otro los efectos que producen y, por último, cómo podemos actuar”, y resaltó que “el acoso escolar nunca desaparece por sí solo, actúa con firmeza y contundencia cuando este aparece, el acoso físico es solo un 10% del total, el verbal y, sobre todo, el psicológico son tanto o más dañinos que el físico. Lo peligroso es que no son tan visibles y sus secuelas no se curan con una pomada o una tirita”.
“Para nosotros es un problema muy serio”, comenzaba diciendo el agente tutor y Policía Local Ángel Blanc, y explicó que “sabemos que la salud mental de nuestros menores es fundamental, sobre todo para los que han sufrido acoso escolar”, por ello, “cuando en 2017 planteamos este programa, novedoso en la comunidad andaluza, nos decían que no tenía sentido, pero nosotros sin apenas recursos empezamos trabajando el absentismo escolar, el consumo de drogas de los menores y el acoso escolar, porque muchas veces pensamos que los problemas que tienen los menores no están interrelacionados, pero la mayoría de veces sí lo están. Nuestro objetivo es la prevención de los mismos”.
Al escenario también subió una representante del colectivo de padres y madres, Elena España, quien detalló cómo se debe actuar cuando le ocurre a un hijo. “Lo primero es sentarnos con él/ella y hablar del tema. Preguntarle qué está ocurriendo y dejar que se explique. Posteriormente, contactar con su tutor para saber de parte de éste que ha ocurrido e intercambiar impresiones, si fuera necesario poner en conocimiento de la jefatura de estudios qué ha pasado y así puedan adoptar las medidas protocolarias. Todo ello conservando la calma”.
Por último, Carmen Cabestany, hizo una petición: “hay demasiados niños que sufren bullying. Demasiados niños que van al colegio con miedo, y demasiados niños que no son ayudados por los adultos que tienen a su alrededor. Esto tiene que cambiar. Os pido a cada uno de vosotros que hagáis lo posible porque esto es cosa de toda la sociedad. Hay que seguir dando visibilidad”.