Los menores de quinto curso del CEIP Jardín Botánico de La Cala de Mijas realizaron esta mañana un paseo guiado por la Senda Litoral y después tuvieron la oportunidad de visitar el cabo rocoso ubicado en la playa de Calahonda. Una experiencia muy atractiva para los pequeños y, también, aseguran, muy distinta a las clases teóricas del aula. “Nos han explicado la fauna, tanto vegetal como marina de esta zona; las aves y muchísimas cosas que son divertidísimas”, comentó uno de los alumnos, Gabriel Ramírez. “A mí me ha parecido muy interesante la flora y la fauna de esta playa, me ha gustado mucho y también el paseo por la senda”, añadió otra menor, Guliana Pasitonio.
Durante la visita, los estudiantes estuvieron acompañados por la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Mijas, Arancha López (Cs), quien valoró la importancia de que los niños aprendan desde pequeños a cuidar del entorno natural. “Los alumnos que realizan esta actividad la disfrutan muchísimo, porque están en contacto directo con el medio ambiente del municipio. Los niños tienen la oportunidad de ver ‘in situ’ la vida que hay en nuestra playa, disfrutan por ejemplo viendo un cangrejo o un tomate de mar y es, a través de la experiencia, la mejor manera de concienciar a los niños sobre la importancia de cuidar y respetar nuestro entorno natural”, apuntó la edil.
Una experiencia única
Libreta en mano, los menores fueron anotando todas las curiosidades que se iban encontrando a su paso. “Hoy, además, tienen la suerte de que la marea está baja y ofrece la oportunidad de ver muy bien la fauna que vive en este ecosistema, que normalmente está sumergida y que hoy está al descubierto, entonces los niños están pudiendo ver desde pulpos, hasta mejillones o anémonas”, puntualizó el técnico de Medio Ambiente Juan Luis Vega, encargado de guiar la excursión.
Fue el propio centro educativo el que solicitó al área de Medio Ambiente la realización de esta excursión enfocada a la educación medioambiental. En el caso de la actividad de hoy, “ha sido una excursión interpretativa donde les hemos hablado a los estudiantes sobre el ecosistema litoral de aquí”, explicó Vega. Los niños aprendieron curiosidades sobre las torres defensivas, la flora invasora, etcétera. Y, sobre todo, les pareció curioso el cabo rocoso de Rocas del Mar, en Calahonda.
“La verdad que se les ve muy contentos con esta clase tan educativa, están aprendiendo cosas muy interesantes, van tomando nota y espero que después en clase les den buen uso a lo que han aprendido”, finalizó el educador medioambiental.
Concienciación
En cuanto a lo que aprendieron tras esta experiencia, los pequeños tienen claro el mensaje que hay que transmitir a la sociedad: “Que si vamos por ahí tirando plásticos o cualquier otro resto por cualquier sitio, dentro de unos años seguramente nuestros nietos ya no podrán disfrutar de esto”, apuntó el joven Gabriel. Así que, como dijo Giuliana, “tenemos aquí una playa excelente y, por favor, cuidémosla porque tenemos una flora y una fauna excelentes y una poseidonia extraordinaria”.
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