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Viernes 22/11/2024

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Alejandro Jaime localiza a la protagonista de una fotografía que tomó su padre en 2007

La instantánea, titulada ‘La palangana’, fue hecha durante un viaje de Jesús Jaime a la India

F.M.R. En el año 2007, el reconocido fotógrafo mijeño Jesús Jaime Mota viajó a la India para dejar constancia a través de su cámara de la realidad de las vidas en ese país asiático. Durante los días que pasó allí, Jesús Jaime tomó la instantánea de una niña lavándose los pies en una palangana, antes de acudir a la escuela. Una imagen, titulada ‘La palangana’, que, desde entonces, ha cautivado durante años a cientos de personas, hasta el punto de que es una de las instantáneas más vendidas en la Galería Fotoart, que hoy en día regenta en Mijas Pueblo su hijo, el también fotógrafo Alejandro Jaime Núñez.

Y, ahora, esa imagen ha conectado dos tiempos y dos mundos doce años después. Porque Alejandro Jaime también siente una lógica fascinación por ‘La palangana’, tanto, que el pasado mes de noviembre realizó un viaje a la India para, entre otros planes, encontrar a la protagonista de la fotografía y relatarle la historia que su padre inició en ese ya lejano año 2007.

Una auténtica odisea que ha llevado a Alejandro tras los pasos de su padre, que desgraciadamente falleció en el año 2011, para localizar a esta joven llamada Kanchan.

“Proyecté un viaje por India para fotografiar a tigres, ya que también fotografío naturaleza”, relata Álex Jaime, “pero también quise pasar por el Pachewar que es donde mi padre tomó esta imagen para encontrar a la niña y dársela de recuerdo”. Alejando afirma que “no es la primera vez que hago esto, ya encontré a otro niño en Etiopía que mi padre fotografió, porque me parece que estas personas deben conocer qué pasó con las imágenes que les tomamos, es algo que les debemos”.

Localizar a Kanchan no resultó difícil, “gracias a la amabilidad de las gentes de Pachewar que se acordaban perfectamente de mi padre”, pero lo que sí supuso un escollo fue la situación familiar de Kanchan que “al estar casada, necesitaba el permiso de su marido y su familia, por suerte, el padre de Kanchan intercedió y pudimos conocernos”, rememora.

Una historia que marca un hito más en la cada vez más importante carrera de este joven fotógrafo que lleva su mirada mijeña a las zonas más alejadas del globo, con el fin de que podamos verlas con otros ojos. Tal y como hizo su padre antes que él.

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