F. M. Romero. La oruga conocida como la procesionaria del pino es una larva cuya peligrosidad radica en los pelillos urticantes que recubren su cuerpo que, además de proteger al insecto, pueden ser arrastrados por el viento y afectar a humanos y mascotas. Para prevenir la aparición de tan molesto bicho a principios de la primavera, la Concejalía de Parques y Jardines está desarrollando el plan anual de fumigación, que este año abarcará entre 80 y 100 hectáreas del término municipal por donde se expanden estos árboles y se prolongará hasta finales de diciembre. La edil responsable de Parques y Jardines, Verónica Ensberg (PSOE), recordó que el plan arranca por las zonas “más cercanas a los núcleos de población y a los centros educativos de la localidad”. El método que se emplea, principalmente, es mediante “la fumigación con mangueras y cañones de un insecticida ecológico e inocuo para las personas y la fauna”, asegura.

Los trabajos, además, se están desarrollando por norma general de noche para interferir lo menos posible en el día a día de la ciudadanía. En la campaña de fumigación de este año también se da una novedad importante y es que, junto con este método de rociado, y en los árboles que se encuentren cercanos a zonas sensibles como los centros educativos, se empleará un sistema de inyección de endoterapia vegetal.

Así, en palabras de Damián Quintana, asesor de la empresa Serviplaga Pest Control, con este invento desarrollado en Andalucía “se inyecta el insecticida directamente en el tronco, que se expande por todo el sistema circulatorio del árbol”.

De modo que “cuando la oruga se alimente de la madera del árbol, muera”, afirma. Este insecticida inyectable también es inocuo para el resto de especies animales e insectos.
Entre los puntos donde se va a actuar se encuentran la zona del hipódromo, La Muralla en Mijas Pueblo, Camino de Campanales, avenida de Los Lirios, Cortijo Don Elías y Sierrezuela, entre otras.

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