Irene Pérez. Lo cierto es que todo esfuerzo tiene su recompensa, y si no que se lo digan al grupo de nueve niñas y niños que, dirigidos por la profesora de baile de la Universidad Popular de Mijas, Bernardi Gabriel, ha logrado uno de sus grandes sueños: ser reconocidos en toda Europa. Todos ellos participaron el pasado sábado, 13 de julio, en el certamen de danza ‘Dancing Stars. Vive tu sueño’, que tuvo lugar en la ciudad italiana de Roma y que contó con la asistencia de grupos procedentes de Italia, España y Francia, entre otros países del continente europeo.

El grupo mijeño participó en dos modalidades, Danza Española y Flamenco, aunque en este último solo bailaron cinco de los nueve alumnos. Pero lo importante es que en ambas pruebas se alzaron con distinciones. En el primer caso, los alumnos quedaron subcampeones de la modalidad de Danza Española, mientras que en la de Flamenco obtuvieron un merecido tercer premio en la categoría de cadete avanzado.

“Estamos realmente sorprendidos porque el nivel de los grupos era muy alto y, en el caso de la modalidad de Flamenco, también hubo muchísima participación”, explicó Bernardi Gabriel, quien también destacó que “a pesar de llevar dando clases de baile desde hace 33 años, es la primera vez que nos presentamos a un certamen de este tipo y, por si fuera poco, hemos conseguido dos premios importantes”.

La profesora también tuvo palabras para sus alumnos, cuyas edades se comprenden entre los 10 y 14 años. “Estos dos reconocimientos son el resultado de muchísimas horas de ensayos, de mucho esfuerzo, de mucha constancia. A pesar de su corta edad, han demostrado que sienten pasión por el baile y muchos de ellos ya reconocen que quieren dedicarse profesionalmente a la danza”, valoró Gabriel.

Para llegar hasta aquí, el grupo ha ido superando diferentes pruebas clasificatorias, comenzando por el campeonato provincial (septiembre de 2018), siguiendo por el andaluz (diciembre de 2018) y finalizando en el nacional (marzo de 2019). “Para las dos primeras pruebas presentamos dos coreografías diferentes a las que luego hemos presentado en el campeonato nacional y, ahora, en el europeo. Y además de los bailes, el vestuario también ha sido diferente, por lo que el esfuerzo y el coste económico también ha sido mayor”, señaló Gabriel, quien tampoco se olvidó de la ayuda prestada por los familiares “para confeccionar los trajes, recaudar fondos para el viaje y acompañar a los niños en esta bonita e inolvidable experiencia”.

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