Antonio Ruiz era de esas personas que dejan huella allá donde van. Su recuerdo permanecerá siempre entre los mijeños y, especialmente, entre los mayores de La Cala, quienes lo tendrán siempre muy presente, sobre todo cuando acudan al hogar del jubilado. Y es que la Asociación de Mayores, que Antonio dirigió durante ocho años, le rindió ayer jueves 23 un pequeño homenaje póstumo con el descubrimiento de una placa en la que reza que el Centro de Mayores se inauguró siendo él presidente.
“Era una gran persona y siempre quedará en nuestros corazones su gran labor y su gran amistad”, afirmó ayer el nuevo dirigente de la asociación, Juan Carlos Pérez, momentos antes de descubrir la placa. Su familia agradeció el gesto de corazón en un día en el que “las palabras se hacen difíciles”, como dijo una de las hermanas de Antonio presentes en el acto junto a su mujer, Remedios Fernández, sus hijas y otros familiares y amigos. La teniente de alcalde de La Cala y concejala de Mayores en este núcleo urbano, Silvia Marín, resaltó su lucha por la Asociación de Mayores. Precisamente su afán por conseguir el centro de La Cala, calificado por Ruiz como uno de los mejores del país, fue ayer uno de los logros de este caleño de adopción que más destacaron sus vecinos. El acto concluyó como a él le hubiera gustado: con el canto del Himno de la Alegría por parte del Coro de Mayores. Antonio se fue el pasado día 12, pero su huella seguirá en La Cala de Mijas.

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