El pasado 30 de diciembre, el alcalde de Mijas, Ángel Nozal, solicitaba al Juzgado de Instrucción número tres de Fuengirola amparo judicial, a fin de poder precintar el salón en el que estaba prevista la celebración de una macrofiesta de Nochevieja. Los promotores habían vendido más de 1.700 entradas para un espacio cuyo aforo legal es de apenas 284, lo que motivó al Consistorio a confirmar ante las autoridades judiciales la posibilidad de precintar el local, a fin de evitar una tragedia.

Diez días después de los hechos, muchas de las personas que adquirieron sus tickets siguen sin saber si podrán recuperar el dinero. “Normalmente las reclamaciones ante Consumo se realizan contra la entidad o persona que presta el servicio, pero en este caso no aparece en las entradas el nombre del promotor”, afirman desde la Oficina Municipal de Información al Consumidor, donde, en los últimos días, han atendido a más de 200 personas por este caso.
Ante estas circunstancias, los responsables en materia de consumo reiteran la falta de competencias de la administración local en este asunto, instando a los afectados a tramitar la pertinente denuncia ante los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

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