Pocas personas en Mijas conocen el término municipal como nuestro protagonista. Capataz de la Renta Básica, llegado el mes de junio, se enfunda en su tiempo libre el uniforme de guarda forestal para vigilar las casi 9.000 hectáreas de nuestra sierra.Una doble faceta profesional que, a sus 51 años, convierte a Francisco Cuevas en un testigo de excepción del valor natural y medioambiental de nuestro municipio.

Mijas Semanal. ¿En qué consiste el trabajo que hacéis en los caminos rurales?
Francisco Cuevas. Limpiamos las zonas que tienen mucha masa forestal, quitamos todas las hierbas, despejando los caminos, dejándolo todo limpio.

M.S. ¿Cuántas personas tiene a su cargo?
F.C. Ahora mismo 14 personas, pero en unos días entran cinco más. Es un buen número de trabajadores. Aunque con la labor que tenemos por delante, siempre podemos decir que cualquiera que nos manden es bienvenido.

“Es primordial tener limpias las cunetas y las zonas próximas a las carreteras”M.S. ¿En función de qué criterios se organiza el tamaño de los grupos?
F.C. Depende de temas como la urgencia del trabajo o la disponibilidad de equipos. Un grupo como el que llevo está muy bien, se divide en grupos de 4 o 5 y podemos actuar en tres frentes distintos. Es algo que, además, nos permite actuar con mayor seguridad, por eso repartimos las distancias entre unos y otros.

M.S. Hablamos de un trabajo que necesita continuidad, la hierba no cesa de crecer.
F.C. La hierba blanda ahora deja de crecer, así que una vez cortada ya no vuelve a salir hasta el año que viene. Quedan las plantas más duras, las que tienen raíces más profundas, las que todavía están muy verdes, esas las cortas y vuelven a salir con fuerza. Por lo que priorizamos el trabajo sobre aquella maleza, que una vez quitada, sabemos que no saldrá. La hierba, para que no salga de un año para otro, es necesario usar herbicida, pero su uso es ilegal, está prohibido. Ten en cuenta que no solo trabajamos por tener el campo bonito, trabajamos por seguridad, seguridad para todos, especialmente para las viviendas rurales. Un ejemplo es este alcornocal en el que estamos, que se conoce como el ‘Cerro la Orza’, uno de los parajes más bonitos de Mijas, con el trabajo que estamos haciendo, reducimos el riesgo de que arda en caso de incendio.

M.S. ¿Cuáles son sus últimas actuaciones?
F.C. Además de este alcornocal, hemos hecho El Esparragal, estamos trabajando todo el sendero del río Gomenaro, Camino de Campanales y arroyo María Barranco, que es un sitio cercano al núcleo urbano de Las Lagunas y por tanto bastante peligroso.

M.S. Hablaba antes de evitar incendios, priorizan en ese sentido de cara al verano.
F.C. Es primordial tener limpias las cunetas y las zonas próximas a las carreteras, una colilla lanzada, en un descuido, con el campo seco, puede causar un grave problema. Por eso, es nuestra prioridad tener las carreteras lo más limpias posible. Después nos dedicamos a hacer cortafuegos.

M.S. ¿Complica su trabajo el hecho de que hayamos tenido un año lluvioso?
F.C. A mí, personalmente, me encanta que haya llovido. El agua es vida, los campos están más bonitos, soy un enamorado de la naturaleza. El hecho de que haya más pasto por culpa de las lluvias, es normal, pero para eso estamos aquí, para limpiar el monte.

M.S. ¿Qué previsión de trabajo hace para las próximas semanas?
F.C. Vamos a hacer cortafuegos y nos vamos a acercar a las urbanizaciones, son zonas turísticas, tenemos que ser conscientes de que deben estar limpias. Y no lo digo solo por el hecho de ofrecer una buena imagen, lo digo porque son zonas de viviendas junto a masas forestales, un incendio sería muy perjudicial allí.

M.S. ¿Cómo son las personas que le acompañan?
F.C. Yo no las cambiaría por nadie. Estoy muy contento con ellas, tienen muchas ganas de trabajar, algunas incluso han estado en Infoca, se nota que son verdaderos profesionales. Es una pena que estén seis meses nada más, pero tienen que dar paso a otras personas que también necesitan trabajar.

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