Con esta actuación, el consistorio ratifica su compromiso de crear este tipo de zonas de seguridad para evitar la propagación del fuego en caso de incendio.  Una máquina trabaja en el límite entre Mijas y Marbella, bajo la ermita de Calahonda, en un lugar que se vio afectado por el gran incendio del verano de  2012.

Es un emplazamiento de difícil acceso. En el siniestro de agosto del pasado año, el INFOCA solo pudo trabajar aquí a través de medio aéreos, ya que hasta ahora era imposible acceder con vehículos contra incendios.

El objetivo es que este camino evite la proliferación de las llamas y “facilite el acceso a este lugar de bomberos y otros servicios de emergencias”, explicó el concejal de Zonas Rurales del Ayuntamiento de Mijas, Cristóbal González, quien aseguró que estará listo "antes del verano, además estamos aprovechando para limpiar toda la zona de maleza".

La intención es unir este cortafuegos con otros dos caminos que rodean la urbanización, lo que supondrá una mayor protección de toda esta parte del municipio frente a los incendios.

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