El Archivo Histórico del Ayuntamiento de Mijas ha recibido la donación por parte de la vecina Aurora Cabello Porras de dos piletas de mármol, procedentes de una antigua batana ubicada en el paraje de Los Espartales-Las Lomas de Mijas, ingenio donde se fabricaba pasta de papel mediante un sistema hidráulico movido por la fuerza de agua y que constituyeron una pujante industria en el municipio desde el siglo XVIII.
Con la incorporación de las piletas al Archivo Histórico, el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Mijas quiere que todos los ciudadanos conozcan una forma de vida del pasado que contribuyó de forma notoria a la economía del municipio.
El proceso por el cual se conseguía la fabricación de la pasta de papel, consistía en machacar contínuamente trapos y otros tipo de materias orgánicas sobre una pileta de mármol con agua, mediante unas mazas accionadas por un molino empujado por la fuerza del agua, entonces muy abundante en la Sierra de Mijas. De esa molturación se obtenía una pasta húmeda que tras ser colada en cedazos se conseguía la materia prima con la que se fabricaba papel.
Un sistema puramente artesanal que, según diversos documentos históricos, fue muy habitual en Mijas - y en menor medida en otros puntos de la provincia de Málaga - por la existencia de numerosas correntías de agua con cuya fuerza se lograba accionar el sistema hidráulico que permitía el funcionamiento de el batán.
Para la instalación de las piletas de mármol en el patio del edificio del Archivo Histórico, en la calle Málaga de Mijas Pueblo, empleados municipales de los Servicios Operativos han requerido del uso de una grúa de gran tonelaje, que necesitó realizar complicadas maniobras hasta depositar las piezas sobre firme.
La llegada de las piletas al Archivo se ha efectuado en presencia de la concejala de Patrimonio Histórico, Carmen Márquez, quien agradeció el “gesto altruista y solidario de Aurora Cabello Porras no con el Ayuntamiento, sino con todos los mijeños”.
“Queremos contribuir a que los mijeños conozcan el pasado”, aseguró la concejala para justificar la instalación de las piezas de mármol en el edificio del Archivo Histórico, que en próximas fechas será oficialmente inaugurado tras ser sometido a obras de adaptación, con el objetivo de convertirse no sólo en un lugar donde conservar vestigios del pasado, sino para ser un centro de estudios y consulta para eruditos e investigadores.
Aunque no hay datos exactos de la antigüedad de las piletas, todo apunta a que éstas tienen más de doscientos años, según ha señalado el responsable del Archivo Histórico, Juan José de la Rubia.
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