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Viernes 22/11/2024

Reportajes

Los jóvenes de Antenas Juveniles echan una mano a Suspiros de Cuatro Patas 

  • Los 15 voluntarios han conocido el trabajo que realiza el colectivo y han dado un paseo con los animales por los alrededores del refugio
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Este viernes han compartido la mañana con parte de los más de 60 canes que se encuentran en la asociación esperando un hogar definitivo 

Cuando se quiere ayudar, no hay excusas. Ni siquiera las altas temperaturas que tenemos este viernes han echado atrás al grupo de 15 voluntarios de Antenas Juveniles de Mijas que hoy han prestado su tiempo, su atención y, sobre todo, mucho cariño a los perros que atiende Suspiros de Cuatro Patas. A primera hora de la mañana se han dado cita en el refugio de la asociación, que se encuentra en Camino de Campanales en Las Lagunas. Allí les han explicado el trabajo que realiza el colectivo a la hora de rescatar, cuidar y, lo más importante, buscar un hogar definitivo a estos.

Este es el segundo año que se lleva a cabo esta iniciativa, en la que el grupo de jóvenes voluntarios colabora con el colectivo dedicando un par de horas a los animales. “Nosotros todos los días tenemos paseadores, pero raramente salen todos los perros a pasear, porque vienen una o dos personas en el turno y sacan a uno o dos perritos. Entonces hemos preparado un paseo en grupo, vamos a ir con ellos a la zona de los colegios y de María Zambrano que tiene más sombra”, explicó Emi Jiménez, miembro de la Junta Directiva de Suspiros de Cuatro Patas, encargada de coordinar la jornada. 

Aaron Carvajal es uno de los jóvenes voluntarios de Antenas Juveniles que el año pasado participó y desde entonces ha continuado colaborando con Suspiros. “Lo bueno es que hay muchas formas de ayudarles: si tienes tiempo, como yo, puedes ser voluntario, puedes ayudar a darle de comer, a jugar con ellos o pasearlos; también puedes donar alimentos o dinero, para ayudarles en sus tratamientos y las cosas que necesiten”, contó el voluntario, quien reconoció que “a mí ir al refugio me aporta mucha felicidad: llegar y que los perros vengan hacía mí, me salten, trabajar con ellos, porque hay perros que son más cariñosos, otros son más miedicas, pero me reconforta la verdad estar con ellos porque son mi pasión”. 

Para María García y Aitana Ruiz, en cambio, ha sido la primera vez pero, aseguran, se trata de una actividad muy gratificante, tanto para los perros como para ellas. “Para mí esto es perfecto, si tuviese tiempo vendría mucho más a sacarlos, alguna tarde o colaborar con algo así como casas de acogida, eso sería mucho que mejor”, señaló Aitana, mientras María, afirmó sentirse bien “porque son perros que no tienen familia o no están para acoger todavía, y pasar un rato con ellos creo que les viene bien a ellos y a nosotros, porque la compañía de un animal nunca viene mal”.

Los perros se han derretido con las atenciones recibidas por los jóvenes.

Los perros se han derretido con las atenciones recibidas por los jóvenes.

Antes de salir a pasear los voluntarios han conocido el refugio y el trabajo que realiza la asociación.

Antes de salir a pasear los voluntarios han conocido el refugio y el trabajo que realiza la asociación.

El grupo a las puertas del centro de Suspiros de cuatro patas en Camino Campanales (Las Lagunas).

El grupo a las puertas del centro de Suspiros de cuatro patas en Camino Campanales (Las Lagunas).

La caminata les ha llevado por varios puntos de Las Lagunas.

La caminata les ha llevado por varios puntos de Las Lagunas.

Aitana Ruiz y María García han acompañado en su paseo a Turco y Rosa respectivamente.

Aitana Ruiz y María García han acompañado en su paseo a Turco y Rosa respectivamente.

Aaron Carvajal con una perrita muy especial, Sol. El joven participó el año pasado en esta iniciativa y desde entonces colabora con la asociación.

Aaron Carvajal con una perrita muy especial, Sol. El joven participó el año pasado en esta iniciativa y desde entonces colabora con la asociación.

Situación preocupante

Suspiros de Cuatro Patas atiende, entre los animales que tienen en su centro y los que están en casas de acogida, una media de 40 o  50 perros, aunque actualmente esa cifra supera los 60 y, lo peor, sigue creciendo.  “Llevamos un verano muy malo, porque se han parado en seco las adopciones, muchos avisos y lamentablemente hemos tenido que cerrar las puertas en el sentido de decir, no somos capaces de acoger a más perros, tenemos lista de espera incluso para los rescates”, lamentó Emi Jiménez.  La situación, por tanto, es bastante complicada, mientras que ayudarles, nos cuenta, es bastante sencillo, “necesitamos, para empezar, que las personas sean responsables con sus mascotas, que castren a su mascotas y no tengan camadas indeseadas, porque esas camadas son las que acaban en la calle y en las perreras, o atropellados en las cunetas. Actualmente, por ejemplo, tenemos 18 cachorros”, insistió la representante de Suspiros de Cuatro Patas, quién concluyó recordando que “siempre hay muchas maneras de ayudar, hay muchas protectoras que estamos siempre deseando que vengan voluntarios, paseadores, casas de acogida.. así que les pido a todos que se animen, que rompan el hielo, que marquen la diferencia y que acudan a cualquiera de las asociaciones que tengan cerca a echar una mano”. 

Suspiros de Cuatro Patas (https://suspirosdecuatropatas.org) es una organización animalista sin ánimo de lucro que funciona gracias a las donaciones y los voluntarios. Actualmente necesitan, sobre todo, voluntarios para pasear los perros en los turnos de mañana y tarde.

 

 

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