Si hay un lugar realmente mágico donde vivir la Noche de San Juan es en la playa, claro. En La Cala de Mijas la celebración contó con lo necesario para vivir una velada inolvidable: música en directo, entretenimiento para toda la familia, los baños a la medianoche en el mar y, por supuesto, la quema de los júas realizados por las vecinas caleñas que desde hace más de 40 años los crean para la ocasión.
El evento tuvo como epicentro la emblemática plaza de El Torreón, donde vecinos y turistas se congregaron para participar en las festividades y dar la bienvenida al verano. El área de Fiestas y Tradiciones se encargó de organizar la velada, en la que no faltó ningún detalle, como señaló la alcaldesa de la ciudad, Ana Mata (PP), quien además destacó que “Mijas celebra esta tradición con la vista puesta en dejar lo malo atrás y con la esperanza de que solo vengan cosas buenas: un verano mejor que se aúne a un año mucho mejor”.
Por su parte, la edil de Fiestas y Tradiciones, Silvia Marín (PP), quien ha trabajado con los implicados en la organización del evento, señaló que “es una noche completa, en la que todos deseamos algo bonito, algo bueno para este año que nos espera y tras el trabajo realizado solo queda desear que a todos se les cumpla su deseo”.
Colaboración
El consistorio trabajó codo con codo con la Asociación de Jóvenes de La Cala y los chiringuiteros caleños para que no faltara de nada durante la noche de San Juan, incluida música en directo sobre el escenario que hizo bailar a grandes y pequeños, desde las primeras horas de la noche, juegos y comida. La presidenta de la Asociación de Jóvenes de La Cala, Paula Moreno, afirmó que “recibimos la propuesta de parte del Ayuntamiento de poner la barra en San Juan y nos pareció algo bueno, ya que somos una asociación nueva que comenzamos en enero, y estamos teniendo muchos proyectos y nos pareció una idea bastante importante para darnos a conocer”.
La seguridad del evento estuvo a cargo de agentes de la Policía Local, bomberos y voluntarios de Protección Civil, quienes garantizaron el correcto desarrollo de las actividades y velaron por el bienestar de todos los asistentes. La limpieza comenzó sobre las 4 de la madrugada, cuando los asistentes se fueron marchando.
Encuentros entre amigos y familiares
La noche invitaba a disfrutar de la velada junto a amigos y familiares en el núcleo marinero de Mijas, que cada año es fiel a esta tradición, lo que hicieron vecinos como Diana Barrientos o Leonardo Coiduras, quienes coincidieron en que cada año acuden a la Noche de San Juan para mojarse los pies en la orilla del mar. Y es que tras la quema del júa, muchos participantes se dirigieron a la playa para cumplir con el ritual de mojar los pies en el mar, algunos incluso se bañaron y se notó la presencia de familias enteras, desde padres con bebés hasta abuelos, incluso mascotas.
Aunque algunos se confundieron un poco de noche para buscar algo de intimidad, como Felipe Paredes, al final se unieron a la fiesta. “Tenía planteado salir en un plan más íntimo con mi pareja y estar los dos tranquilos, pero hemos visto el ambiente que había por aquí por La Cala y nos hemos animado a sumarnos”, aseguró este vecino.
Quema de júas
Después a cumplir las tradiciones en torno a esta noche mágica, como hicieron los jóvenes Daniela Alcalá, Diego González y Antonia Lérida, que siguieron paso a paso las directrices que hay que hacer para que se cumplan los deseos de San Juan.
Y en la Noche de San Juan no puede faltar la quema de júas. Este año las vecinas que desde hace más de cuarenta años se encargan de crearlos volvieron a cumplir con la tradición, preparando para esta ocasión un júa inspirado en los zoológicos y la vida natural. Y todo ello con materiales reciclados.
Así, a la medianoche, La Cala se iluminaba con las llamas del fuego que queman todo lo malo, al tiempo que se convierten en faro para atraer todo lo bueno.
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