El Partido Popular de Mijas considera que la ordenanza de Vía Pública, aprobada en marzo de 2012, debe evolucionar igual que “lo ha hecho el desarrollo urbanístico, y fijar criterios diferenciados según la actividad económica o residencial de cada calle o zona”.

Por ello, el concejal Mario Bravo ha propuesto hoy que se inicien los trámites para la revisión de esta ordenanza, de modo que se garantice el derecho de uso de la vía pública, tanto para los peatones como para los comerciantes, y “se eviten así los enfrentamientos que han surgido recientemente, provocados por el incumplimiento de la ordenanza vigente”.

“La solución no es incumplir la norma, sino modificarla si creemos que es mejorable”, afirma Bravo, que defiende la posibilidad de diferenciar por zonas, que pueden ser calles o núcleos de población, dependiendo de la actividad que se desarrolle en cada una de ellas, garantizando la circulación de peatones (y vehículos, en su caso), pero a la vez permitiendo su utilización por parte de agentes económicos. “Compatibilizar la actividad residencial y económica es lo que mantiene viva una ciudad”, explica el edil, y con ese objetivo, anuncia, se pondrá en marcha una comisión de trabajo lo antes posible, “dando audiencia a todos los interesados”.

Finalmente, el concejal quiso mencionar la declaración de Mijas Pueblo como conjunto histórico-artístico en 1969, fundamentalmente, por sus “depuradas características de pueblo andaluz y su privilegiado emplazamiento”, que, recuerda, fueron los aspectos que sirvieron de base para este reconocimiento, y “el compromiso del actual gobierno por mantener sus valores estéticos”.

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