El Ministerio de Sanidad impone a partir de este miércoles el uso obligatorio de las mascarillas en centros sanitarios y sociosanitarios de toda España con el objetivo de controlar el repunte de virus respiratorios. Finalmente, las comunidades deberán acatar la obligación pese a su rechazo mayoritario. 

El uso de las mascarillas volverá a ser obligatorio en concreto en hospitales, centros sanitarios y sociosanitarios. La incidencia de enfermedades respiratorias está siendo muy fuerte este invierno en todo el territorio y el Ministerio, por encima de las competencias de las comunidades, ha decidido imponer esta obligación de carácter general. 

A pesar de la polémica, ya que muchas comunidades han rechazado la propuesta, el Ministerio de Sanidad impone su uso gracias a la ley ante situaciones de especial riesgo para la salud pública, que regula acciones coordinadas en todo el país. Desde Sanidad se habla de dar soporte jurídico a las comunidades que ya han introducido este uso en centros sanitarios, ya que la consideran “una medida efectiva y de sentido común, avalada por la evidencia científica y que es bien recibida por la población”. Desde el Ministerio, afirman además que “van a seguir trabajando para minimizar los riesgos y homogeneizar la protección de la salud". 

La incidencia en Andalucía de las enfermedades respiratorias, por el momento, no es alarmante, y se sitúa en 505 por 100.000 habitantes lejos de la media nacional, situada por encima de los 952.

 

Aumento de la demanda de test y mascarillas 

Tras la oleada de gripe y covid de estas últimas semanas, las farmacias han notado el aumento más que considerable de ventas de medicamentos para combatir los síntomas de estas patologías. Pero, sobre todo, hay una gran demanda de test de covid y gripe, así como  de mascarillas. “¿Síntomas? mal cuerpo, mucha mucosidad, frío, congestión, dolor de cabeza todo un poco”, así, como otros muchos, dijo este martes David Fernández, un vecino de la zona a la farmacia La Unión en Las Lagunas, añadiendo que “estamos todo en casa así, esperemos que sea un resfriado, como ahora hay tantas cosas”. 

“Se ha notado mucho que ha vuelto otra vez la COVID-19, que hay bronquitis y que hay también gripe, sobre todo la gripe A. Se nota muchísimo en la venta de antigripales, en la venta de mascarillas, tanto en la FFP2 como en las quirúrgicas”, explicó Carmen Segura, propietaria de esta farmacia. Ante este panorama, se recomienda el uso de las mascarillas como medida de prevención, “de hecho, se la pone más gente en la calle que aquí en la farmacia. Están respetando un poquito quien viene más resfriada y tiene más síntomas, esa persona sí se pone la mascarilla para prevenir también a quienes tienen enfrente”, añadió Segura. 

Por otro lado, en las farmacias ha comenzado a notarse la falta de suministro de mascarillas quirúrgicas, así como de algunos tipos de test. “Hay test de covid, pero no hay del triple, el que tiene también gripe A y gripe B, que es el que más demandan los pacientes, porque como no saben si es gripe o covid, pues ese es el tipo de test que quieren y ese es precisamente el que falta”, explicó la farmacéutica.

 

Opiniones de la ciudadanía

En la calle, los vecinos de Mijas se muestran a favor de la medida de forma mayoritaria. Jerónimo Jiménez asegura, por ejemplo, que “no hay otra, o te pones la mascarilla o te contagias. Y si tú sigues contagiando nos vamos a contagiar al final todos”. Él lo tiene claro, “el primer motivo por el que ya la uso es porque es una forma de respetarme a mí y a los demás. Es un tema de convivencia básica del ser humano”. Jerónimo añade que “donde no hay mucha aglomeración puedes tener un espacio donde quitarte la mascarilla pero si entras donde hay aglomeración o puede haber algún problema de contagio, la usas, así primero te reservas tú y a todo tu entorno, y también reservas a los demás”. 

Por su parte, Jose Manuel Peña también la está usando ya. “Vimos en la televisión que haría falta para venir al centro de salud. Yo vine ayer a la consulta médica y me la puse, no tengo ningún problema. Es para prevenir. Yo pienso que dentro de un hospital, o centro de salud se debería llevar siempre porque hay demasiados contagios”. 

Inma Benítez dice que “me parece estupendo y además que no la deberían haber quitado, porque hay riesgo de muchas personas, sobre todo niños, personas mayores, con enfermedades crónicas, enfermedades graves y no les viene bien estar cerca porque no se sabe si lo tenemos o no. Y si es la única manera para protegernos, yo no lo hubiera quitado”. 

Rafi Vigo, por su parte, también ve bien la medida: “perfecto, tendríamos que haberla usado todo el invierno, nos hemos acostumbrado a no tenerla ya y la tenemos en la casa abandonada, pero ya mañana va a la mochila la mascarilla”. La familia de Rafi ya ha pasado la gripe, “empezó uno y ya lo cogimos todos”, nos cuenta. De hecho, hoy iba precisamente al centro de salud para cambiar su cita de vacunación de gripe y covid por una nueva fecha, porque no pudieron acudir por ese motivo.

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