Viernes de Dolores, y un año más se volvió a cumplir la tradición en Mijas Pueblo. Las imágenes de la archicofradía del Dulce Nombre fueron trasladadas a la antigua usanza, con horquilla y correón hasta la casa hermandad, desde la ermita de San Sebastián. Muchos vecinos y visitantes se echaron a la calle para vivir este momento. Además, la hermandad presentó los dos nuevos estandartes de sus titulares.
Tarde noche del Viernes de Dolores, y todo preparado para vivir un nuevo traslado, preparativos previos a la Semana Santa mijeña. Tras la misa oficiada por el párroco Francisco Villasclaras, en la iglesia de la Inmaculada con la presencia de hermanos y vecinos de Mijas, el interés se trasladó a la ermita de San Sebastián, sede canónica de esta archicofradía. Allí se concentraban todos los participantes de la comitiva para prepararse de cara a la salida. Correones y horquillas toman el protagonismo hoy, recuperando un viejo uso de la archicofradía. Antes de la salida, se presentaron las novedades de este año: los dos estandartes de los titulares, que se renuevan gracias a la colaboración del Ayuntamiento.
Según la concejala de Fiestas, Tamara Vera (PSOE), “hoy presentamos los nuevos enseres que han sido renovados a través de una subvención que por parte del Ayuntamiento se le ha otorgado. Es una satisfacción ver cómo la inversión pública ha ayudado a mantener vivas las tradiciones de nuestra Semana Santa”.
Las pinturas de ambos han corrido a cargo del pintor Javier Mateo de Baza (Granada) y los bordados y ejecución son obra de Samuel Cervantes Cordero de Alhaurín de la Torre (Málaga). Este bordador y diseñador ha manifestado que “es la primera vez que trabajo para Mijas, pero con mucha ilusión”. El estandarte de la Virgen es completamente nuevo, en terciopelo negro con pintura y este año luce totalmente liso.
Traslado
Tras este acto, comenzó el traslado de los dos titulares, lo primero la salida de la ermita San Sebastián y, posteriormente, la subida, como viene siendo tradicional, por calle San Sebastián, que lucía engalanada para el momento, y con una gran afluencia de público. Acompañándolos, un quinteto de metal con músicos de las bandas de Moclinejo y Alhaurín el Grande.
El cortejo recorrió un corto trayecto pero lleno de momentos intensos y de gran belleza y con el arrope del pueblo de Mijas. También les acompañaron concejales de distinto signo político de la corporación municipal.
Destacado fue el giro de las imágenes entre calle San Sebastián y calle Alegre, donde se concentró una gran cantidad de personas para disfrutar de las vistas.
Las puertas de la casa hermandad se abrieron de par en par para recibir al Dulce Nombre de Jesús y María Santísima de los Dolores. Allí serán entronizados esperando así una nueva salida de Jueves Santo.
Las imágenes lucían espléndidas, el Dulce Nombre de Jesús Nazareno fue vestido por Alberto Moreno y su madre María Santísima de los Dolores por Yeray Carretero junto al equipo de priostia. Satisfacción por el trabajo cumplido y bien hecho. Una de las portadoras, Lucía Ruiz Burgos, nos contaba que “desde pequeña he estado saliendo en esta procesión con el Nazareno y es algo que vas viendo como una meta. Ves la procesión desde siempre y decía yo quiero llegar ahí y, por fin, he cumplido los 18 y aquí estoy. Es un sueño que se ha cumplido”.
Emoción y deseos cumplidos de muchos hermanos del Dulce Nombre que ya están en la cuenta atrás para su salida grande del próximo Jueves Santo. El hermano mayor del Dulce Nombre, Javier Martín Barranquero, respiraba aliviado tras el traslado, “ha salido todo muy bien. Es mucho trabajo, muchísimas horas dedicadas aquí en la cofradía por toda la Junta de Gobierno. Así que muy agradecido a todos y al pueblo de Mijas, por acompañarnos en este pequeño adelanto del Jueves Santo”.
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