Una vez que los colegios electorales cierran a las ocho comienza el escrutinio de los votos, una tarea que depende de los presidentes de las mesas, “que son la autoridad”, explica Raúl Fortes, que ha sido elegido por sorteo para presidir la mesa A del colegio electoral de la Universidad Popular de Mijas Pueblo, donde entre esta y la mesa B 1.847 votantes están llamados a las urnas en la jornada de hoy. El representante de la administración de este colegio electoral, Julio Lozano, les “echa una mano” o les “aconseja” sobre cómo proceder a los miembros de estas mesas.
“Cuando llegan las ocho, nosotros cerramos las votaciones y les toca votar a los miembros de la mesa; es decir, al presidente, los vocales y los interventores que hayan firmado las actas de creación de la mesa electoral”, matiza Fortes. Una vez hecho esto, se echan en la urna los votos que han llegado por Correos. “Luego se procede a abrir la urna y a hacer el recuento de votos”, resume Lozano, que entre sus funciones está la de “abrir el colegio por la mañana y recibir a los miembros de mesa”, además de rellenar “un estadillo con la presencia” de estos y “darles la documentación que les va a hacer falta durante toda la jornada”.
Acta de escrutinio
Luego hay que contabilizar los votos. Se trata de una tarea minuciosa porque tienen que cuadrar. Cada mesa tiene una serie de actas; entre ellas, el acta de escrutinio, “que es la última que se rellena donde vienen las candidaturas de cada partido y ahí van a anotar los votos que tienen cada uno”, añade Lozano. Ese acta “se va a colgar en la puerta del colegio electoral para que todo el mundo conozca los resultados”. También Lozano se queda con una para transmitir los resultados “a través de una tablet a la Junta Electoral de Zona” de forma inmediata y entregarla en el Ayuntamiento y se hacen copias para los interventores o partidos que lo requieran. Al Juzgado de Paz el presidente, que puede elegir si ir escoltado o no, “en este caso por la Guardia Civil”, llevará un sobre y otra se remite a la Junta Electoral de Zona a través de Correos, en ellos se comunican los resultados a través del acta de sesión. Y es que, como explica Lozano, “existen varios juegos de actas porque los partidos políticos también pueden pedir copias. Los originales nunca los damos”, relata el representante de la administración, que añade que, además hay un acta de constitución de la mesa, que se rellena por la mañana y otra de sesión, con todas las incidencias que ocurran durante la jornada.
La copia que se queda Lozano se entregará al Ayuntamiento y sirve para cotejar datos “por si hay alguna incidencia, falta algún acta, hay alguna ilegible o algún dato que no cuadre”. Lo normal es que todo cuadre, ya que si hace falta “se recuenta las veces que sea necesario”, dice Lozano, para añadir que a veces el fallo está en que alguien se ha saltado un número al apuntar el votante. “Buscamos cualquier error que pueda haber, en caso de que no cuadrase se haría un incidencia y sería la Junta Electoral la que decidiría cómo se soluciona”, añade Lozano.
Datos telemáticos
No obstante, pese a esas actas. Una vez que las mesas terminan y todo esté cuadrado se envían los datos de forma telemática para facilitar el escrutinio final. Se hace a través de un “proceso telemático”, explica Fortes: “Actualmente, con la época digital en la que vivimos, a través de una tablet o un ordenador, tenemos una conexión directa con la administración y nosotros cuando terminamos de contar los votos, le mandamos los resultados”. A través de esa tablet durante la jornada electoral se envían otros datos, como el porcentaje de participación. Los responsables de la administración son los encargados de transmitir esos datos.
Todo este proceso puede ser de unas dos horas en un colegio de estas dimensiones. Participar en ello para Fortes “no tiene que significar nada a nivel personal, porque es una atribución administrativa. Te puede gustar más o menos, pero a fin de cuentas es una obligación administrativa”. Y es que él se ha tomado su deber en serio y se ha leído todo el manual que se le entregó: “Lo he leído como tendríamos que hacer todos cuando nos toca. El presidente de la mesa es la autoridad que se encuentra en la habitación cuando estamos en el espacio electoral, que son estas cuatro paredes ahora mismo. Su función es recibir a los votantes, hacer las gestiones para que pueda votar y la persona que tiene que cuidar que todo vaya en orden, como lo estipula el manual”, concluye.
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