Por fin sacamos el paraguas. Hacía más de un año que no se veía caer la lluvia en Málaga de la forma en que lo está haciendo desde la pasada madrugada. Sin lanzar campanas al vuelo, porque el déficit hídrico es grave en la provincia, las precipitaciones de estas últimas horas ayudan a paliar un poco la situación de sequía que padece el campo y los embalses. 

La borrasca Celia nos ha traído hoy en Málaga un paisaje que todavía no se había visto este invierno: abundantes lluvias y también nieve, unos copos que en la Serranía de Ronda ha llegado a alcanzar cotas bajas. En algunos puntos de la provincia se han registrado más de 100 litros según los registros de la Agencia Estatal de Meteorología. En Mijas, a mediodía, se registraban 87,6 en el entorno de Valtocado, mientras que en el pueblo 62,2 y en Las Lagunas 34.

Hoy, como se suele decir, ha llovido bien, pese a que la previsión era de riesgo ya que Meteorología activaba anoche la alerta roja por riesgo de lluvias, un aviso que esta mañana se rebajaba a naranja y ya ha sido desactivado. 

Y todo apunta que en el resto de la semana se repita la misma estampa. La previsión es que siga lloviendo en Málaga. Este martes y miércoles la borrasca aún va a afectar directamente a la provincia con precipitaciones que se asemejarían a las de hoy lunes y que podrían ser localmente fuertes. Aemet todavía espera lluvias para el jueves, eso sí, más débiles que los días anteriores. Lo mismo sucederá el fin de semana, cuando todavía cabe la posibilidad de tener precipitaciones, ya más residuales.

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