Nos acercamos a cualquiera de las alrededor de 18 paradas de taxi que hay repartidas por el término. En cada una, ocho, nueve, diez…, incluso 12 coches. Pueden pasar horas hasta que se mueve alguno. La espera se hace interminable. Es lo que viven a diario los cerca de 200 taxistas que integran la Asociación de Radio Taxi Mijas. Pero… ¡Al mal tiempo, buena cara! Los taxistas en Mijas lo tienen claro y se renuevan para salir de esta mala racha que, dicen, “está durando demasiado”.

Desde el 1 de abril los taxistas de Mijas lucen uniforme: camisa blanca y pantalón oscuro. Algo sencillo, pero “somos los primeros taxistas en España en contar con uniformidad”, explica este medio el nuevo presidente del colectivo, Anastasio Moya, que asume el cargo desde primeros de marzo. La iniciativa se ha hecho “en consenso, porque desde la nueva junta directiva queremos siempre el visto bueno de la mayoría”.

Mijas Semanal ha visitado una de las paradas y los taxistas nos comentan, entre risas, que están contentos con su nueva imagen. “Parece que al cliente le gusta”, decía uno. “La respuesta está siendo inmediata”, añade el presidente. “Desde que llevamos uniforme, nos ha salido trabajo con complejos turísticos que hasta ahora no nos llamaban”, entre otros motivos, porque tenemos que competir con los chóferes privados uniformados “y eso da mucho caché”.

Para completar la vestimenta, los taxistas llevarán también corbata, obsequiada por el Ayuntamiento de Mijas. “Estamos estudiando la propuesta porque es muy importante apoyar a este colectivo y estamos en estrecha colaboración”, opina al respecto el concejal de Taxi, Santiago Martín.

Medidas anticrisis

Pero la uniformidad no es su única medida anticrisis. “Fuimos el primer municipio español el año pasado que bajó las tarifas un 10 por ciento, a pesar de la subida del gasoil y cuando más apretaba la crisis”, añade Moya. Además, Radio Taxi Mijas cuenta con ofertas y paquetes especiales para “adaptarnos a la situación actual”.

Radio Taxi Mijas fue el único en España que bajó sus tarifas un 10% el año pasado. “Nuestra forma de competir es bajar los precios”, según MoyaEn cuanto a la competencia, el presidente de los taxistas nos explica que luchan contra una competencia legal e ilegal “bestial”. Además del intrusismo, compiten con los coches de empresa con conductor, los llamados coches de abono. “Ahora con la crisis, los rent a car ofrecen también vehículos con chófer y además juegan con que tienen vehículos grandes y buenos y los conductores siempre van uniformados”. Así que Radio Taxi Mijas también ha solicitado coches de nueve plazas, que comenzarán a rodar este verano, “y podremos cobrar también por persona en este caso, como hacen los conductores privados”.

En cuanto a los taxistas ilegales, “cobran más que nosotros, aunque parezca mentira; además dan comisiones, aunque sean ilegales, y, a veces, es muy difícil pillarles”, dice Moya. “En lo que llevamos de mandato, la Policía Local ha localizado ya a siete de estos infractores y seguimos insistiendo en ello”, explica Martín. Pero lo que quizás muchos no sepan es que Radio Taxi Mijas dispone de un seguro de responsabilidad que cubre cualquier incidencia al 100 por cien si el taxi ha tenido un incidente”, añade Moya, quien apunta que se trata de un seguro, pionero también en nuestro país, que ronda los 4.000 euros. “Es una garantía para las empresas que nos contraten, así trabajan sobre seguro”. “Esta es la primera crisis de la que vamos a salir  con competencia, y además, con competencia legal. Estamos viendo dónde nos quedamos cuando superemos esta situación”, sentencia.

Novedades

“Desde que he asumido mi nuevo cargo, tengo dos objetivos: bajar los gastos mensuales que tenemos, unos 13.500 euros, sin mermar la calidad del servicio, y buscar trabajo”, detalla Moya. En este sentido, ya se están poniendo en marcha nuevas iniciativas para generar clientela. Pronto todos los taxis contarán con taxímetro, “tenemos algunos en prueba y los pondremos en marcha cuando concretemos las tasas con Fuengirola, porque no queremos que haya agravios comparativos entre dos localidades tan próximas”, aclara.

Gracias a la colaboración del Consistorio, dice Moya, todas las paradas contarán con paneles informativos con las tarifas. “Hemos acondicionado y señalizado 14 paradas y seguimos trabajando para crear nuevos asentamientos”, afirma por su parte el concejal del área. Los taxistas mijeños disponen de vehículos adaptados a las personas con discapacidad, sillas para bebés, monovolúmenes para equipajes grandes, servicio de visitas turísticas guiadas con conductores formados en viajes, así como taxistas de habla inglesa o francesa, si el cliente lo solicita.

En cuanto al nuevo reglamento de la Junta de Andalucía, desde el Consistorio se está trabajando para adaptar la normativa local. “Nos vamos a sentar con todos los asalariados y propietarios del taxi para consensuar el nuevo reglamento, para mejorar la imagen y el servicio que presta el taxi”, aclara Santiago Martín.

Mijas, un municipio peculiar

“En Mijas siempre ha sido muy agradable trabajar, pero ahora es muy duro”, reconoce el presidente de Radio Taxi. “No tenemos un casco urbano que genere mucha clientela ni nocturnidad, aquí no hay discotecas. Así que tenemos que volver a recuperar nuestra mayor clientela, el turismo residencial, que tanto hemos perdido por los chóferes privados”. ¿Y de qué manera?, preguntamos. “Bajando los precios, no queda otra. Ofrecemos recogida y llevada, no cobramos el tiempo de espera y si pagan en el momento, tienen descuento. En las urbanizaciones, todo el mundo encuentra alguien que le lleve, el jardinero, el vecino, o el amigo… es muy difícil de detectar al pirata y de recuperar al cliente”. En cuanto a los que conducen bajo los efectos del alcohol, “es mejor gastarse seis euros en un taxi y evitar problemas, pero muchos aún no lo entienden”, opina Moya.

El gasto medio diario de un taxi son 67 euros “y eso cuesta ganarlo”, apunta Mota. “Y si encima tienes chófer, el gasto son 86 euros. Yo llevo 21 años de taxista y nueve como dueño, pero el año pasado tuve que decirle a mi compañero que no había trabajo para los dos. Hay días que son desesperantes, algunas veces hago 18 euros, 9, 14… ¡en 14 horas de trabajo! Se dice pronto”.

A veces los asalariados prefieren irse al paro porque ganan más, explica el presidente. Los compañeros leen, tienen Internet en el móvil, charlan… pero la espera se hace larga. Y así, charlando, mientras esperan a que llegue algún cliente, nos despedimos de los taxistas. Les deseamos suerte, “eso sí que nos hace falta”, exclama uno. Anastasio Moya se marcha corriendo para atender sus responsabilidades familiares. Claro, los taxistas también tienen vida propia, aunque a veces no lo parezca.

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