Redacción. El edil de Infraestructuras, José Carlos Martín (Cs), ha visitado esta mañana las obras del segundo tramo de la calle Campos, en Mijas Pueblo (desde la calle Cañada del Barrio hasta su intersección con la Carretera de Coín) que se encuentra al 75 por ciento de su ejecución, por lo que para Navidad estarán finalizadas. “Esta renovación de todos los servicios viene a mejorar la calidad de vida de todos los vecinos de la zona y a poner el broche de oro a todas las actuaciones que hemos estado llevando a cabo en el entorno para modernizar las canalizaciones y darle un impulso a todas las prestaciones”, apunta el concejal.
De esta manera, estos trabajos, que fueron adjudicados por un montante de casi 160.000 euros junto a los relativos a la zona de La Fragua, suponen la instalación de una nueva red separativa de pluviales y fecales así como la de abastecimiento de agua, telecomunicaciones, electricidad y alumbrado público. “Para este equipo de gobierno es esencial velar por el bienestar de los mijeños en todos los sentidos y el hecho de apostar por este tipo de obras que evitan, entre otras cuestiones, problemas de inundabilidad, son una garantía para que el día a día de los residentes sea más confortable”, añade Martín.
Además, el proyecto contempla una renovación del pavimento que va acorde con el del resto del núcleo urbano. Para la ejecución de esta remodelación integral ha habido cambios en el tráfico que se han ido acometiendo con el transcurso de las obras.
De la misma manera, y ya finalizada también la zona del entorno de La Fragua, el departamento de Infraestructuras, según el equipo de gobierno, “culmina la puesta en valor que en los últimos cuatro años ha llevado a cabo la concejalía en el Barrio Santana”.
Los trabajos se suman a los ejecutados en las calles Coín, Barrio Santana y Campos en Mijas Pueblo. Estas tres vías, consecutivas entre sí, forman un largo vial de directriz sensiblemente recta donde existía el inconveniente de algunos estrechamientos entre fachadas enfrentadas. Por ello, la intervención ha contemplado un tratamiento de rodaduras de modo que se ha llevado a cabo una adaptación dimensional, evitando así quiebros en el trazado.
Desde el consistorio recuerdan que el Barrio de Santana conserva las tradiciones y la esencia de antaño del municipio, por este motivo, “el proyecto ha respetado la estética predominante y esta segunda etapa sigue esa misma directriz”.

Igualmente, la existencia de múltiples rincones y espacios residuales ha permitido hacer actuaciones de embellecimiento urbano con la incorporación de macetones en forma de tinaja para la siembra de flores que adornen el paseo por las calles aportando valor sensitivo al contraste entre las paredes blancas de las casas y el colorido vegetal.

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