Para esta mañana estaba prevista la ejecución de una orden judicial de desahucio que pesaba contra Mónica Masías y su hija (menor de edad) por el impago del alquiler del piso en el que viven en calle Mijas (Las Lagunas). Masías está enferma de diabetes, asegura que no cuenta con recursos para afrontar los pagos y que llevan meses viviendo sin luz y sin agua. El desahucio era a las 11:30 horas pero ha quedado aplazado para finales de septiembre. Hoy, madre e hija han estado arropadas a las puertas del edificio por representantes de organizaciones como Stop Desahucios, Plataforma de Afectados por la Hipoteca, UGT, Izquierda Unida, CGT, la concejala de Mijas Helena Adba, Devidi o la Asociación de Desempleados de Mijas.
“Estoy feliz, he visto que, en este momento, he logrado algo que no había conseguido durante mucho tiempo, el hecho de tener un poco de dignidad, de que alguien me escuche, de que alguien haga algo por mí, que es muy diferente decir que hacer”, dijo Masías. El equipo de gobierno, por su parte, asegura que “el Ayuntamiento de Mijas ha logrado paralizar provisionalmente” el desahucio.
El ejecutivo afirma que Servicios Sociales y Renta Básica han brindado “todo tipo de ayudas a esta familia”. Recuerdan que desde 2006 han recibido por parte de Servicios Sociales ayudas como suministros básicos vitales o vales de alimentos. El equipo de gobierno destaca que en abril se le “otorgó una ayuda de 1.200 euros para negociar con su casero o para otro alquiler y no llegar a esta situación”. En total, estima el Ayuntamiento, esta residente suma “86 intervenciones de este tipo a lo que hay que añadir el apoyo prestado por parte de la trabajadora, la educadora social y la psicóloga del área”. Este departamento, subrayan, ha tramitado también la discapacidad de la vecina y ha puesto en marcha todos los trámites para que evalúe la administración competente una pensión no contributiva.
El Consistorio afirma que desde Renta Básica se le ha facilitado un “puesto adaptado a sus condiciones físicas de conserje a jornada completa en un colegio del municipio”. El equipo de gobierno destaca que continúa trabajando para ayudar a esta familia y a otras que puedan encontrarse en algún momento en una situación similar. Tanto Servicios Sociales como Renta Básica, recuerda el ejecutivo, “realizan un seguimiento y adecuación del puesto de trabajo en función de las necesidades o limitaciones físicas de las personas que acceden a los diferentes empleos, velando no solo por su bienestar en el desempeño de las tareas a realizar, sino también, por su reincorporación al mercado laboral”.
Juan Carlos Caballero, coordinador de PAH Mijas-Fuengirola, afirmó que “el siguiente paso va a ser negociar con las diferentes administraciones que le den a Mónica una vivienda digna”, a lo que añadió que “todos estamos contentos por lo que hemos logrado entre todos, seguiremos luchando por perseguir los sueños de la gente y que nadie pierda su vivienda y tengan una segunda oportunidad”. Por su parte, Leticia González, de Stop Desahucios Málaga, explicó que “se le han facilitado diferentes ayudas desde lo institucional que realmente no lo son porque lo mal llaman Renta Básica, se le facilitan a una mujer que tiene un montón de problemas de columna, de diabetes, que tiene una serie de enfermedades acumuladas, lo que realmente necesita [Masías] no es un empleo, sino una vivienda en condiciones dignas, con luz y con agua y una ayuda en las tareas diarias, como sería una ayuda a la dependencia”.
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